¿Se te pelan las manos? Tu hígado puede estar funcionando mal

Hay diversos factores para que las manos se pelen; desde temas que pueden ser tratados, falta de consumo de agua o una mala rutina de cuidado diario hasta otras que representan algo más severo, como problemas en el hígado.

Primero debemos poner nuestra atención en nuestra dieta, ya que si estamos mal alimentados nuestro cuerpo comenzará a protestar con erupciones cutáneas o irritaciones y desprendimiento de la piel de nuestras manos.

Esto se debe a que ponemos a trabajar a nuestro hígado el doble, provocando una intoxicación. En algunas ocasiones, el elevado ácido úrico provoca dicha situación.

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Es importante que cada cierto tiempo acudas al médico para una revisión general y detectar las verdaderas razones por las que tus manos comienzan a pelarse, ya que la resequedad en las manos también puede ser síntoma de cirrosis.

El hígado es responsable de más de 500 tareas, de las cuales al menos 22 son vitales para el buen funcionamiento de nuestro organismo, por lo que es muy importante que cuidemos de nuestro órgano.

Estas señales alertan de problemas en tu hígado

No solo las manos peladas son una alerta de problemas en el hígado, hay otras manifestaciones:

Piernas hinchadas

El hígado es el órgano que se encarga de mantener el equilibrio de electrolitos y agua en el cuerpo. Si algo malo sucede, tu cuerpo tiende a acumular líquido de forma anormal produciendo cuadros de edemas (hinchazón).

¿Cómo reconocerlo? Es muy sencillo, solo deberás apretar con tus dedos parte de tus piernas, y si notas que quedan hoyos en ellas, es probable que tu hígado no esté funcionando bien.

La ictericia

Dicho síntoma es uno de los más conocidos y frecuentes en los pacientes hepáticos, ya que la piel y la parte blanca de los ojos tienden a ponerse amarillos. Esto se debe a los niveles anormales de bilirrubina producidos por el hígado.

Asimismo, otro síntoma de la ictericia es la coluria, la cual torna el color de la orina a un color como de “té cargado”.

Problemas con la comida

Si cada vez que vas a comer sientes asco a los alimentos, te mareas, tienes digestiones pesadas o sufres de estreñimiento latente, cuidado, es porque tu hígado no está funcionando bien.

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Moretones sorpresivos

Si eres joven y nunca habías experimentado un caso similar, puede ser una señal de una enfermedad hepática (cirrosis hepática), la cual se produce por el bloqueo de la sangra a través del hígado.

Desánimo

Los problemas del hígado pueden provocar encefalopatía hepática, la cual evita que el hígado drene las toxinas de la sangre, por lo que estas son trasladas al cerebro produciendo así, una disminución de la función mental.

Esto puede ser corroborado por las personas a tu alrededor y por ti mismo, cuando de un momento a otro pasas, con extrema facilidad, entre ciertos niveles de emociones.

Así que ya sabes, si presentas por lo menos alguno de estos síntomas es momento de acudir con tu médico para una valoración y comenzar con un cambio de hábitos en tu vida o en su defecto comenzar un tratamiento.