El coordinador de Semillero Empresarial para el Desarrollo de México, Carlos Salvador Abreu Domínguez, consideró que, en torno al nuevo Reglamento para el Control de Tabaco, si bien busca un objetivo para bien de la salud, hay dudas en el sector empresarial en cuanto a si se logrará el objetivo de reducir el consumo.
En cambio, empresarios temen por afectaciones económicas a establecimientos comerciales.
EL REGLAMENTO
El nuevo reglamento, refirió, prohíbe la exhibición directa o indirecta de productos elaborados con tabaco, en puntos de venta, como medida de Salud Pública.
Además, implica la ampliación de los espacios cien por ciento libres de humo y emisiones en lugares de trabajo y de concurrencia colectiva como parques, plazas, playas, estadios, transporte público y escuelas.
"Las autoridades dicen que con estas disposiciones se asegura mayor grado de protección para la salud de las personas, y que privilegian el interés superior de la niñez".
Con estas medidas, de acuerdo con lo expuesto por las autoridades, se busca que en un horizonte de 10 años, con estas medidas se evite más de 49 mil muertes prematuras y más de 290 mil nuevos casos de enfermedades asociadas al tabaquismo.
EMPRESARIOS TIENEN INQUIETUDES
Pero, en contraste, empresarios consideran que la nueva reglamentación perjudica a los comercios, sobre todo a las tiendas de abarrotes, apuntó Carlos Abreu Domínguez.
Y es que expuso, mediante un video difundido, que, de acuerdo con lo manifestado por el sector empresarial, en las tiendas de abarrotes, "el 25 por ciento de sus ventas también dependen de tabaco".
Además, han señalado, dijo, "que este tipo de políticas prohibicionistas atentan contra la libertad comercial, la independencia de los consumidores para decidir, golpea a la industria y perjudica los empleos de los trabajadores".
Incluso, los empresarios platean, comentó, "que la modificación al reglamento de la Ley General para el control del Tabaco, viola la Constitución Mexicana, y que no conseguirá su objetivo de evitar el consumo de tabaco".