Una caída de 10 por ciento en ventas han tenido los empresarios restauranteros desde que se registró el cierre de la autopista 150D debido a un derrumbe en un talud, indicó el presidente de la Cámara Nacional de la Industria de los Restaurantes y Alimentos Condimentados (Canirac), Carlos Cruz Mendoza.
"Sí hubo un golpe, se notó en noviembre, a mediados de noviembre, que hubo ventas bajas, estábamos considerando ciertas ventas y tuvimos 10 por ciento abajo, entonces sí hubo un impacto en el ámbito turístico", expuso.
Cruz Mendoza expuso que aunado a la afectación que hay en esa importante carretera, lo que ha incidido en una menor llegada de turistas, también se ha visto una mayor apertura de establecimientos, por lo que hay mayor oferta para los visitantes.
Explicó que han abierto más restaurantes esperando que haya más visitantes de fuera, pero con el número de establecimientos que hay actualmente operando, no se llega a cubrir ciertos gastos.
Destacó que Orizaba se ha consolidado como punto turístico y no tanto por la industria, a pesar de que hay muy buena derrama por las empresas asentadas en la ciudad y en la zona, pero los servicios es lo que está ayudando a la base económica.
El presidente de la Canirac resaltó que afortunadamente, a pesar de ese problema que se tiene por el cierre de la autopista, no se ha interrumpido la cadena de suministro y lo que no se encuentra en Orizaba se consigue en Córdoba.
Incluso, señaló que desde que vino la presidenta a la ciudad, se comenzó a ver más movimiento y avances de los trabajos para limpiar la autopista, cuyo cierre es un grave problema porque es la vía que conecta al sureste del país con el centro.
Confió en que como se anunció, para enero comience a haber circulación en esa vía de comunicación.