El Gran Premio de Mónaco de este año comenzó con un giro inesperado cuando el piloto mexicano Sergio ‘Checo’ Pérez sufrió un fuerte accidente en los primeros segundos de la carrera, poniendo fin a sus esperanzas de remontar desde la decimosexta posición.
Justo después de superar las icónicas curvas de Sainte Dévote y Beau Rivage, Checo se dirigía hacia la curva de Massenet cuando Kevin Magnussen, del equipo Haas, intentó un arriesgado adelantamiento por el lado derecho. La maniobra resultó en un contacto con la llanta trasera derecha del monoplaza de Pérez, causando que el piloto mexicano perdiera el control y se estrellara contra las barreras de contención.
El vehículo de Red Bull Racing quedó irreconocible tras el impacto, pero, afortunadamente, Checo pudo abandonar el coche por su propio pie.
Mientras tanto, el accidente no solo afectó a Checo Pérez, sino que también involucró a Nico Hulkenberg, el otro piloto de Haas, quien no pudo evitar el contacto y también quedó fuera de la carrera. El inicio del prestigioso evento automovilístico estuvo marcado por la tensión y el drama, dejando a los espectadores y equipos en un estado de expectación por el resto de la competencia.
Mientras tanto, el equipo de Checo Pérez y sus seguidores se recuperan del shock y ya ponen la mirada en la próxima carrera, con la esperanza de que sea una oportunidad para redimirse.