¿Y las motopatrullas…? ¡En una bodega paisano...!

¡Ah, mi gente! Todo parece indicar que en Coatzacoalcos la seguridad está más descuidada que una gallina sin plumas.

Y es que, según me contó un compadre desde el palacio, ya tienen más motos acumuladas que ropa en los tendederos del tianguis del terraplén en domingo.

Resulta que la entrega de 20 motocicletas realizada por el alcalde Amado Cruz Malpica que deben servir para patrullar y vigilar las calles, las tienen en una bodega guardaditas.

 ¿Y por qué? Pues porque no han comprado los seguros ni han sacado los permisos de emplacamiento. ¿Situación difícil? ¿Un tema muy complicado? Hasta parece que están en un dilema más grande que el de una iguana minatitleca intentando cruzar la carretera de Las Matas.

Las donaciones de motocicletas de habitantes de la colonia Petrolera y las del Observatorio Ciudadano de Coatzacoalcos están en las mismas condiciones.

Todo ese esfuerzo de la gente parecer ser en vano, porque las motos están más apagadas que el entusiasmo de uno después de la dieta de enero.

Así que la idea tecnológica de ponerle a los uniformes de los policías un QR sirve para dos cosas cuando para perseguir a un delincuente no tienen ni patín del diablo.

SÍ MÁS DONACIONES PERO…

Aplaudimos que consigan donaciones, pero todo se va al hoyo cuando no logran tener la cobertura de protección ante un accidente ni cumplir con el requisito básico de la placa de la motocicleta. ¡Se nos va el esfuerzo entre las manos como agua entre los dedos!

Entonces, mientras las 28 motocicletas que ya tienen bajo resguardo la policía municipal, más las 2 que en marzo les dará el Observatorio Ciudadano, solo estarán acumulando polvo en alguna bodega. Esas llantas podrían ser hasta almohada para alguna alimaña

Las ratas de dos patas, y las de las bodegas, seguro se están riendo a carcajadas de que estos "instrumentos para abatir la delincuencia" sigan almacenados.

La percepción de inseguridad anda más alta que las olas en la playa, y con las motos guardadas, eso va a subir como la espuma en una cerveza bien fría. ¡Ay, Coatzacoalcos, siempre nos sorprendes con tus ocurrencias! ¡Seguiremos al tanto de este culebrón!