Este jueves, en el área de compresoras de Ogarrio fue diferente, no hubo carcajadas en ‘la media’, solo oraciones y anécdotas de su compañero Pablo Sánchez Torres, el obrero muerto junto a su hija de siete años en el accidente automovilístico ocurrido sobre la carretera Cosoleacaque-Nuevo Teapa.
¿Te enteraste lo que pasó?, ¡pobre mi compa!, se hablaron entre susurros los obreros a quienes por momentos se les quebraba la voz por el impacto de los hechos, los lentes se empañaron por contener el llanto y la agitada respiración se agolpaba en el cubrebocas.
Solo el rugir de los equipos se escucharon, parecían que eran las únicas que laboraban de costumbre, porque los hombres fuertes que trabajan en la industria petrolera por momentos tragaron saliva para contener el llanto y lamentaron lo sucedido con el compañero caído.
Hasta las viandas con comida se abrieron despacio y sin hacer ruido para no interrumpir las anécdotas que contaban de Pablo, un hombre tranquilo, afable y dispuesto ayudar a los que conocía y a los que no conocía… también.
El trabajador acaecido era operario de segunda y como pocos, se daba el tiempo para enseñar o dar un consejo a los de nuevo ingreso sobre la manera en la que debían trabajar con seguridad y sobre el funcionamiento de los equipos.
Pablo era una persona que amaba a sus hijos, la mayor de nombre Genesis de 7 años, murió junto a él de manera instantánea dentro del vehículo que terminó debajo de una pesada unidad.
Los cuerpos de ambos eran esperados durante la mañana y tarde de ayer en la funeraria de la Sección 22, en donde serían velados y posteriormente sepultados, se espera que eso pueda ocurrir hasta el día sábado, ya que se espera que sus familiares puedan llegar del sureste del país.
Actualmente la esposa del petrolero Jocelyn Maldonado y su hijo de dos años de edad, se debaten entre la vida y la muerte por las severas lesiones que sufrieron al quedar prensados entre los fierros retorcidos, todos, familiares y amigos esperan que ocurra un milagro, por lo que hasta la tarde de ayer se mantenían las cadenas de oración.