¿Has notado que al pedir comida por aplicaciones como Rappi, Didi o Uber Eats, el precio es más elevado que acudiendo directo al restaurante? No es sólo por la tarifa de envío.
La Procuraduría Federal del Consumidor alertó a los usuarios que el uso de estas apps implica un costo adicional que podría afectar su economía.
Si bien es una alternativa útil para ganar tiempo y minimizar esfuerzos, no representa un ahorro al bolsillo del comensal.
¿Qué factores inflan los precios de la comida?
· Uso de la app, dado que el restaurante debe cubrir una cuota con la empresa desarrolladora, es común que los precios del menú digital sean más altos que los de la sucursal
· Envío, el cual varía por la distancia del repartidor, el restaurante, el domicilio y las condiciones climáticas
· Comisiones, de acuerdo al tamaño de la orden o establecido como un porcentaje del subtotal
· Propinas, estos negocios exhortan agregar extras para el repartidor, aunque no son obligatorias