El presidente Andrés Manuel López Obrador manifestó este lunes su renuncia a su militancia en el partido que fundó, el Movimiento Regeneración Nacional (Morena).
A menos de 24 horas de que la militancia morenista decidiera por unanimidad que Luisa María Alcalde, titular de Gobernación sea la presidenta, y su hijo, Andrés Manuel López Beltrán, secretario de Organización, el mandatario saliente reafirmó que renuncia al movimiento:
“Estoy muy contento con eso. Yo también ya renuncio a la militancia partidista, pero estoy muy contento.
“Llevo ya bastante tiempo satisfecho, contento, alegre porque el pueblo de México supo elegir a la nueva presidenta, una mujer excepcional, extraordinaria, inteligente, con experiencia, sensible, honesta y de buenos sentimientos, Es lo mejor que le pudo haber pasado al país”.
El anunció de hoy en la Mañanera, reafirma lo que el propio titular del Ejecutivo Federal adelantó en una carta que envió al VII Congreso Extraordinario de Morena, y que fue leída por el gobernador de Sonora, Alfonso Durazo.
En la misiva, el presidente López Obrador advirtió al partido que deben evitar caer en los vicios de la “vieja política”:
“No permitan que los antiguos vicios y perversiones de la política florezcan en nuestras filas. Eviten la prepotencia, la búsqueda del poder por el poder, la soberbia, la corrupción, el nepotismo y el sectarismo. No roben, no mientan, no traicionen nunca al pueblo”.
Por ello, solicitó a los morenistas fortalecer la hermandad, el compañerismo y la institucionalidad del partido a través de “la unidad, la humildad y la honestidad”.
Dicho mensaje se da a dos días de que el propio López Obrador pusiera de ejemplo en la Mañanera la desaparición del Partido de la Revolución Democrática (PRD):
“Ojalá y lo que llevó a que el PRD perdiera su registro sirva de lección a otros partidos para no cometer los mismos errores y para no olvidar que el actor principal en todo proceso político siempre es el pueblo”.
Esto, en torno a que el sol azteca le dejo de tener “cariño al pueblo”; “con el pueblo, todo; sin el pueblo, nada. Solo el pueblo puede salvar al pueblo. Y nunca más el desprecio al pueblo; ignorar al pueblo, nunca más”.