¿Te preguntas por qué se le dice "la manzana de Adán"? El significado te sorprenderá, pues aunque tiene algunos tintes de religión, también cuenta con una explicación científica.
El origen de este popular término se origina en el evento bíblico ocurrido en el jardín del Edén, donde Eva le dio de comer a Adán la fruta prohibida; de acuerdo al texto, cuando Adán comía la manzana ofrecida, ésta se le quedó atorada en la garganta y se le hizo un nudo en el cuello. Sin embargo, la ciencia nos muestra otro enfoque, y nos explica las razones que justifican por qué los hombres tienen la manzana de Adán.
Con el fin de entender claramente este concepto, es muy útil conocer dos importantes estructuras anatómicas observadas en la región del cuello: la laringe, también llamada la caja de la voz y una estructura en forma de mariposa, que se encuentra justo en la parte superior de la glándula tiroides, conocida como cartílago tiroides, prominencia laríngea o manzana de Adán.
Anatómicamente, la manzana de Adán, también llamada la nuez de Adán, se encuentra tanto en hombres como en mujeres, con la diferencia de que en los hombres aparecen de manera más prominente.
Esta diferencia se origina en la pubertad, siendo uno de los caracteres sexuales secundarios originados por el aumento de los niveles de testosterona; este incremento de la hormona sexual masculina provoca que toda la estructura de la laringe se alargue, incluyendo el cartílago tiroides, haciendo que las manzanas de Adán de los adolescentes se tornen notablemente más grande. Es por esta razón que los hombres desarrollan tonos de voz más profundos y graves.
La laringe, además de albergar las cuerdas vocales y servir de caja de resonancia de la voz, tiene otras funciones que incluyen la protección de sustancias inhaladas o ingeridas. Un propósito alternativo que tiene esta estructura anatómica, es ayudar en el proceso de cerrar las vías respiratorias en la garganta al tragar. Es por esta razón que la manzana de Adán, parece desaparecer cuando se traga.