A casi cinco meses de que haya llegado al cargo el secretario de Seguridad Pública (SSP), Cuauhtémoc Zúñiga Bonilla, no se observa en la entidad un cambio sustancial, consideró el activista Jairo Guarneros Sosa, asesor del Grupo Regional Independiente de Taxistas de Orizaba (GRITO).
Consideró que a estas alturas el titular de la SSP ya debería tener una radiografía de la situación en Veracruz y se hubieran mejorado las estrategias o implementado nuevas para dar mejores resultados.
Mencionó que se han presentado algunos detenidos por delitos de alto impacto, pero en muchas ocasiones la probidad de los elementos de esa corporación "deja mucho qué desear".
Recordó que hay muchas quejas que se han dado en lugares donde la seguridad está a cargo de la SSP, referentes a que se inventan delitos a los ciudadanos y se violentan sus derechos humanos.
Consideró que tras su llegada a finales de octubre del 2022 se esperaba que al menos "hubiera logrado meter en cintura" a los elementos de la Secretaría y que hubiera acabado con las extorsiones.
Mencionó que lamentablemente, la labor del secretario de Seguridad Pública deja mucho qué desear, pues los hechos de violencia han estado imparables en la región y en el estado y es lo que más afecta a la población.
Cabe recordar que el sector de taxistas es de los que más ha sido golpeado por la inseguridad, tanto en la región de Orizaba como la de Córdoba, con asaltos, robos de unidades y hasta asesinatos y desapariciones.
Ejemplo de ello es que el miércoles fue hallado en el municipio de Fortín un taxi cuyo conductor había sido reportado como desaparecido el pasado miércoles, y aunque la unidad fue encontrada, del trabajador del volante aún no se sabe nada.