Enfrentar los problemas de conducta de niños y adolescentes requiere un trabajo conjunto entre familias e instituciones, señaló Citlalli Pardo Acosta, presidenta de la Provincia Veracruz de la Asociación de Scouts en México.
Destacó que el movimiento scout se ha convertido en una alternativa para padres que buscan reforzar la disciplina y los valores en sus hijos; aunque, subrayó, esto no sustituye la responsabilidad educativa del hogar.
"Nos encontramos con casos de niños que llegan por recomendación de psicólogos porque tienen problemas para obedecer, realizar tareas escolares o respetar normas.
"Aunque los scouts pueden ser un gran apoyo, somos claros en que el cambio no ocurre sin la colaboración activa de los padres", afirmó Pardo Acosta.
La líder scout hizo hincapié en que el movimiento ofrece un ambiente educativo no formal que complementa los valores inculcados en casa, pero no puede suplir la atención y constancia que deben proporcionar las familias.
"Los padres son los principales responsables de la formación de sus hijos. Nosotros somos un refuerzo, no la solución completa", puntualizó.
Pardo Acosta expresó que los problemas de conducta están en aumento, una situación que preocupa a nivel nacional y que ha llevado a los padres a recurrir a los scouts como una estrategia para "enderezar a sus hijos".
No obstante, advirtió que sin el compromiso familiar los resultados serán limitados. Comentó que ese y otros temas fueron tocados durante una reunión estatal en donde se analizaron las actividades realizadas a lo largo del año y los retos futuros para las agrupaciones en Veracruz.
La presidenta destacó que el movimiento scout lleva años trabajando por el rescate de valores y la disciplina, pero insistió en que la formación integral de los jóvenes es una responsabilidad compartida entre las familias y las instituciones.