El próximo miércoles 12 de julio se celebra el día del abogado, desde 1960, porque fue el año en que “Diario de México” pidió al presidente de la República de aquel entonces, Adolfo López Mateos, que marcara esta fecha como un suceso especial en todo el país.
Los abogados jamás deberían hacer una pregunta a una abuela si no se encuentran preparados para la respuesta.
Durante un juicio en un pequeño pueblo, el abogado acusador llamó al estrado a su primera testigo, una mujer de avanzada edad.
El abogado se acercó y le preguntó: – Sra. Fortunati: ¿sabe quién soy?
Ella respondió: – Sí, lo conozco señor Sanny. Lo conozco desde que era un niño y francamente le digo que usted resultó ser una gran decepción para sus padres. Siempre miente, cree saber de todo, es muy prepotente, abusivo, engaña a su esposa y lo peor de todo, manipula a las personas. Se cree el mejor de todos cuando en realidad es un pobre hombre. Sí, lo conozco….
El abogado se quedó perplejo, sin saber exactamente qué hacer. Apuntando hacia la sala, le preguntó a la sra. Fortunati: -¿Conoce al abogado de la defensa?
Nuevamente ella respondió: -Claro que Sí, Yo también conozco al señor Pérez desde que era un niño. Él es un flojo y medio raro, y tiene problemas con la bebida. No puede tener una relación normal con nadie y es el peor abogado del Estado. Sin mencionar que engañó a su esposa con tres mujeres diferentes, una de ellas la esposa suya, ¿recuerda? Sí, yo conozco al Sr. Pérez. Su mamá tampoco está orgullosa de él.
El abogado de la defensa casi cae muerto.
Entonces, el Juez llama rápidamente a los dos abogados para que se acerquen al estrado, y les dice:
-Si alguno de los dos, le pregunta a esa vieja si me conoce, los mando a la silla eléctrica a los dos.