México al segundo lugar mundial, con aproximadamente previstos, 56 mil millones de dólares en remesas, para 2022.
En muchas formas, frente a la nueva realidad y sus innumerables problemas, sobresalen tanto la consciencia de existencia individual y colectiva, como el deseo imparable de alcanzar una mejor vida.
Y también, debe resaltarse que, en cada vez más y más personas, se advierte la presencia y aumento, de una fuerza imparable de continuidad y de renovación, que no acepta conformismo o resignación, ante sacrificio y limitación; ni simulación y disimulo, impuesto como un presente obligado de limitaciones y sacrificios, con pocas o nulas oportunidades; inaceptable, un futuro limitado y sin posibilidades.
De ahí el reconocimiento sin regateos, al enorme apoyo de los mexicanos que emigran para enviar las importantísimas remesas. “México se convirtió en el segundo país del mundo con la mayor recepción de remesas durante el año pasado al superar a China y quedar solo por debajo de India”. (La Jornada.020822).
Ahora es evidente el simple hecho de la incapacidad gubernamental y las nulas e insuficientes políticas económicas. Se sabe y es claro, que los gobiernos que no crean alternativas y oportunidades, ni apoyan a obligados a emigrar, pero eso sí, algunos hasta presumen de las remesas que envían los mexicanos que se van, que tienen que partir para sobrevivir, porque en su país simplemente no hay opciones disponibles. Solo emigrando, sus familias reciben las remesas que son la base de la subsistencia de millones y millones de parientes.
Esto obliga, a reconocer y tener siempre presente, que una de las fuentes de ingresos nacionales, es la exportación de millones de pobres, que generan remesas; y que ha llevado al país desde fines del 2020, a ocupar el segundo lugar mundial, solo superado por la India.
Para 2019, en cifras cerradas, según el Banco Mundial, en miles de millones de dólares, sobresalen: India 83, China 68, México 38, Filipinas 35, y Egipto 27. Para el 2021, India llega a 89, México 54, China 53, Filipinas 37 y Egipto 32.
Justo y conveniente. Nunca olvidar que los del heroico y ejemplar esfuerzo, fueron y han sido excluidos y sacrificados, porque su país, su sistema económico y concretamente sus gobiernos, prueban y comprueban su incapacidad de generar, propiciar o alentar, las suficientes políticas y acciones, que permitan brindarles oportunidades y trabajo.
¿Qué hacen los incapaces gobernantes, además de presumir y manipular como autopromoción, la indiscutible y valiosa aportación de los emigrantes con sus apoyos?
Y ahí están las remesas de migrantes mexicanos, como importante y creciente fuente de divisas, junto a las derivadas de la venta de petróleo, la exportación de autos, y el turismo. Queda pendiente de abordar la distribución actual por entidades federativas.
Por ahora, se debe destacar lo claro y evidente: el mayor y más importante programa de ayuda a los pobres no es oficial, no es del gobierno, es de los pobres que se van y ayudan a sus pobres que se quedan.
En este contexto, la inocultable prioridad se hace presente. “Primero los pobres”, porque su presencia integra las mayorías; y, sobre todo, no es justo mantener a seres humanos marginados, excluidos y sobreviviendo de la caridad, las sobras y los desperdicios. No es humano que vivan casi como animales.
Como se prueba y comprueba, son muchos y siguen creciendo, demandando derechos, oportunidades y servicios públicos. Además, no atenderlos implica sacrificarlos o excluirlos, al cancelarles expectativas y esperanzas. Con el menoscabo o la desatención oportuna y efectiva de la pobreza, se mantienen abiertas las puertas de la inconformidad y hasta de la violencia. No hay estabilidad ni paz públicas. Luego entonces nadie está seguro.
Hay, desde luego, activos importantes de los que se puede disponer. Logros y avances que no se pueden ignorar, despreciar ó minimizar.
Y porque ha costado mucho alcanzarlos hay que defenderlos y fortalecerlos. Instituciones, políticas y programas gubernamentales que no solo deben sostenerse sino ampliarse y mejorarse, bajo un denominador simple y sencillo: primero los pobres, haciéndoles efectivos los servicios básicos de la educación, salud, seguridad y recreación. Y, desde luego, promoviendo las inversiones públicas y privadas que mejoren sus condiciones de vida a través de la generación de oportunidades y empleos, eso sí, con salarios dignos.
En fin, oportuna la nota “México segundo mayor receptor de remesas en el planeta: BM” de Dora Villanueva, quien destaca que:
“Las remesas se han consolidado como una entrada de divisas más importante que la inversión extranjera directa en Latinoamérica; muchos países de América Central, cerca de la región andina y del Caribe habrían sufrido un déficit de cuenta corriente si no fuera por estos recursos, detalla el Banco Mundial… En este contexto, debido a las expectativas de un fuerte crecimiento del empleo en Estados Unidos, se espera que las remesas a América Latina y el Caribe crezcan 9.1 por ciento este año y 7.7 por ciento en 2023. Tan sólo en el primer trimestre de 2022, Guatemala registró un crecimiento de 26 por ciento, Nicaragua 26 por ciento, México 18 por ciento, El Salvador 6 por ciento y Colombia 5 por ciento.” (La Jornada 020822).
Se estima radican en EEUU más de 14 millones nacidos en México; y que, adicionalmente casi 24 millones, tienen ascendencia mexicana.
Para concluir es pertinente señalar, que queda mucho por decir y hacer respecto al extraordinario esfuerzo y sacrificio, apoyo y aportación, que hacen los que no se rinden, sobreviven y cumplen con sus deberes, sacrificándose incluso hasta la emigración y separación temporal de sus seres queridos. Son sin duda, verdaderos siervos de la nación.
-Academico.IIESESUV @RafaelAriasH,Facebook:VeracruzHoydeRafaelAriasH