Sorprendió que en los artículos a nivel nacional de la Revista Proceso haya salido salpicado el alcalde de Veracruz, Fernando Yunes Márquez. Sorpresa, porque se trata de una proyección nacional, lamentablemente en un enfoque negativo, por referirse a supuestas asignaciones de contratos de servicios para beneficiar a exfuncionario del gabinete presidencial en el sexenio de Felipe Calderón.
Veracruz por razón de la complejidad política, por la violencia que se ha desatado en los últimos sexenios, recrudecida desde los gobiernos de Fidel Herrera y Javier
Duarte, sin control en el yunismo de 2 años, y con muchas complicaciones en el actual régimen para controlarla, se sube en muchas ocasiones al escenario nacional.
Por ello no debe sorprender que se exhiba periodísticamente a la entidad en ese ámbito mediático, pero en esta ocasión se arrastra a un clan político y a una autoridad municipal.
Y es que de acuerdo a la nota que se reprodujo en los medios digitales este domingo, aunque el artículo es del 13 de diciembre y alguien se encargó de descubrirlo, se expresó lo siguiente:
El alcalde de Veracruz, Fernando Yunes Márquez pagó más de 4 millones de pesos a su amigo Salvador Vega Casillas, el estratega Anticorrupción de Felipe Calderón.
La justificación fue por la “revisión y automatización de procesos de obra pública y adquisiciones de servicios” a la empresa Estrategob, SC.
Vega Casillas, secretario de la Función Pública en el sexenio de Calderón, creó la empresa Estrategob, SC, el 18 de octubre de 2018 un mes después de dejar de ser Senador.
El contrato que el Ayuntamiento que preside Yunes le otorgó a Vega Casillas el 22 de junio de este 2020 - también por asignación directa - fue de 4 millones 60 mil pesos por concepto de auditoría estratégica y asistencia técnica en materia legal (y) administrativa para la revisión y automatización de procesos en materia de obra pública y adquisición de bienes y servicios.
La vigencia del contrato del alcalde panista, hijo del exgobernador Miguel Ángel Yunes Linares, sigue el mismo patrón que los que ha otorgado Francisco Cabeza de Vaca, gobernador de Tamaulipas, a Vega Casillas: solo por 6 meses, del 22 de junio al 31 de octubre de 2020.
En política las alianzas se han hecho de esa forma, no debe sorprender que se beneficie a los amigos, lo que estaría por verse, es si es legal lo que ha hecho Fernando Yunes desde el amparo del poder.
Hace unos meses un grupo de senadores sostuvieron un encuentro con un alto jerarca de la Presidencia de la República, en la confianza y lo ameno de la charla, de pronto el funcionario soltó que Andrés Manuel López Obrador es un hombre que no es vengativo, sin embargo, no olvida.
En el intercambio de ideas se estableció que entre otras cosas, eran las ofensas y las diatribas, calumnias y demás, en forma personal, lo que, a pesar de saber que es parte de la política, le cuesta trabajo olvidar al mandatario.
Y es que uno de esos personajes que tanto ofendió al hoy mandatario durante la campaña presidencial es precisamente el jefe del clan al que pertenece el alcalde. Incluso, varias veces en los recorridos y mítines el hoy presidente mostró la famosa “carpeta azul”, por lo que el hecho de exponer el apellido en un medio nacional pudiera refrescarle la memoria al tabasqueño.
MUY EN CORTO
CAMBIO DE JUECES. En el Poder Judicial sigue la renovación. Y algunos ya han sido insostenibles, si es que acaso alguien quisiera mantener la herencia del ex presidente del TSJE, Edel Alvarez Peña.
De esta forma, han comenzado a pedir algunas renuncias y, en otros casos, el retiro forzoso a Magistrados. El último por cierto fue Andrés Cruz Ibarra quien formó parte del Consejo de la Judicatura, precisamente con Edel Alvarez, a quien lo quitaron la semana pasada.
Ojalá que la designación de los nuevos titulares en este organismo sean jueces con trayectoria, sobre todo en materia penal que mucha falta le hace al Sistema, y se evite la aprobación de quienes no tienen un perfil adecuado.
Hay quienes sin problema pueden enderezar el barco. Se sabe en Veracruz, por ejemplo, de un probo y completo impartidor de justicia, que ha estado precisamente desde Alvarez Peña, desaprovechado. Y es que el juez de control y enjuiciamiento Rafael Hernández Virués, con excelente trayectoria reconocido ampliamente en el ambiente jurídico donde inclusive ha recibido reconocimientos de barras de abogados como la de Veracruz puerto.
El enjuiciador está considerado por sus compañeros jueces y magistrados como uno de los mejores exponentes, además tiene fama de incorruptible.
Los tres magistrados que han tenido que dejar la silla son Pedro Luis Reyes Marín, Martha Ramírez Trejo y Andrés Cruz Ibarra.