A muchos altos, medianos y pequeños funcionarios de los tres niveles de gobierno, el régimen de la 4T les ha transformado radicalmente sus vidas, pero quizá a ninguno como al general secretario de la Defensa Nacional, Luis Cresencio Sandoval, quien según documentos confidenciales de la Sedena extraídos por el grupo de hackers Guacamaya, goza de privilegios que envidiaría un jeque árabe o el empresario francés Bernard Arnault, el más rico del planeta con una fortuna de 210 mil 800 millones de dólares.
Ayer, el diario El Universal reveló que el jefe militar ha gastado más de 500 millones de pesos en viajes al extranjero, acompañado frecuentemente por su esposa, su hijo (un alto funcionario federal de inteligencia), su nuera, su nieta y a veces su consuegra, además de 10 asistentes por lo menos, entre personal médico, ayudantes y escoltas.
A veces han viajado en el jet militar, un Gulfstream G-550, y en otras ocasiones por Aeroméxico, aerolínea a la que en julio de 2019 la Sedena contrató 3 mil 800 vuelos internacionales por 85 millones de pesos.
Pero ésta no es la primera vez que exhiben los excesos del secretario de la Defensa Nacional. El 24 de octubre 2022, el reportero Rivelino Rueda, de El Sol de México, publicó también que el general tenía a su servicio a mil 155 militares de distintos rangos, entre los que destacan cuatro grupos de escoltas de siete integrantes cada uno; tres equipos de “fuerza de reacción” con un total de 21 elementos, así como 40 miembros del Ejército, divididos en ocho equipos, para el resguardo de su familia.
De acuerdo con un documento oficial, fechado en enero de 2019, el titular de la Sedena cuenta con 297 elementos del Ejército y la Fuerza Aérea Mexicanos asignados como parte de su Ayudantía General y otros 858 efectivos militares en distintas labores de atención.
En el denominado “grupo de apoyos diversos”, que pertenecen a la Ayudantía General, el secretario de la Defensa tiene a su disposición a tres peluqueros, cuatro sastres, tres elevadoristas y seis cocineros.
También cuenta con 132 elementos de la Policía Militar (PM), 127 de tropa y cinco oficiales (que no pertenecen a la Ayudantía), para actividades administrativas.
Además, para la seguridad interior de la residencia oficial Quinta Galeana, sede de su despacho, tiene asignados 21 elementos más 71 efectivos para la seguridad exterior y 35 militares para seguridad en la unidad especial de transporte aéreo.
También tiene a su disposición diez aeronaves: siete aviones y tres helicópteros, 20 camionetas para escoltas, de las cuales 17 están blindadas, y 25 vehículos “a disposición de la célula de transportes”, cuatro de éstos con blindaje.
En su toma de protesta como Presidente, Andrés Manuel López Obrador dijo que “la lealtad del Ejército al gobierno y su falta de ambición por el poder económico y político tiene en buena medida su explicación, entre otros factores, en que el Ejército Mexicano no es un agrupamiento elitista, sino que siempre se ha nutrido del pueblo raso”.
Pero el general parece haberle fallado.