Quien no perdió el tiempo y salió a tirar la atarraya ante el río revuelto que dejó en el panismo y a la alianza sureña la traición de los Yunes, fue el excandidato a la diputación local de Movimiento Ciudadano, “El Gallo” Christopher Alan Santos.
A través de las redes sociales lanzó un mensaje sobre la reforma judicial, a los Yunes, al panismo, a la alianza, a aquellos que fueron traicionados y al nuevo proyecto de Movimiento Ciudadano para el 2025.
"El Gallo" criticó duramente la decisión del senador veracruzano Miguel Ángel Yunes de apoyar la reforma judicial, calificándola como un acto traicionero y ruin hacia quienes confiaron en él y lo llevaron a la senaduría en el sur de Veracruz.
Señaló que muchos votantes, tanto a nivel local como federal, fueron engañados, ya que los candidatos del PAN y aliados - al menos dos del PRD- prometieron defender intereses ciudadanos, pero terminaron apoyando la reforma. Sin embargo, a pesar de no coincidir con la decisión, respetaba la intención ciudadana.
Como era de esperarse, el excandidato elogió a los representantes de Movimiento Ciudadano, destacando que este partido representa una opción política más transparente y honesta para Coatzacoalcos.
Expresó su orgullo por los senadores y diputados federales de este partido y afirmó que Movimiento Ciudadano es una alternativa real para las próximas elecciones municipales de 2025. Además, cuestionó cómo los políticos que apoyaron la reforma se atreverán a pedir el voto nuevamente en el futuro inmediato.
Insistimos, “El Gallo” no pierde tiempo y sigue convirtiéndose en el mayor promotor del partido de Dante Delgado en Coatzacoalcos y varios municipios del sur.
En pocas horas, ya se convirtió en un clásico el apotegma de la sabiduría popular:
“Los Yunes ayudaron más a AMLO en 6 minutos que Cuitláhuac en 6 años”.
Es irónico cómo en solo seis minutos, los Yunes lograron lo que la administración de Cuitláhuac García no ha podido hacer en seis años en Veracruz: fortalecer a la 4T.
Y es que, mientras el gobernador del estado se ha enfocado en una gestión marcada por tropiezos, improvisaciones y la ausencia de resultados tangibles, los Yunes, al votar a favor de la reforma judicial, lograron darle a AMLO un empujón inesperado.
Tal vez Cuitláhuac debería tomar nota: a veces, en lugar de mantenerse en la sombra, es más efectivo hacer un movimiento audaz —incluso si eso significa traicionar las promesas previas, como en el caso de los Yunes.
Pero claro, no sería justo culpar a Cuitláhuac por su falta de protagonismo cuando su administración ha sido un desfile constante de escándalos, desde la inseguridad rampante hasta su dificultad para leer un discurso coherente.
Tal vez, en el fondo, Cuitláhuac pensó que su estrategia de “hacer lo menos posible” lo mantendría a salvo de las críticas. Sin embargo, cuando incluso los Yunes, viejos rivales, le roban el protagonismo al traicionar a la oposición y darle oxígeno a la 4T, uno se pregunta: ¿realmente Cuitláhuac tiene algo que ofrecer al siguiente gobierno?
El apotegma se ha convertido en un clásico instantáneo, y también una especie de epitafio para una administración veracruzana que, en seis años, no ha dejado más que promesas incumplidas y una sensación de vacío.
Mientras tanto, los Yunes, con su astucia política, demostraron que en el mundo de la política no se trata de lealtades, sino de oportunidades. Y en ese sentido, parece que Cuitláhuac aún está aprendiendo las reglas del juego, aunque con los días que le quedan en el gobierno, quizá nunca las domine.
Acostumbrados a no guardar los tiempos legales, desde hace un par de meses, ya hay personajes dentro de varios partidos políticos en el sur de Veracruz, que han empezado a moverse, proyectando su imagen en redes sociales, sobre todo.
Una vez que la doctora Claudia Sheinbaum y la ingeniera Rocío Nahle tomen posesión, la carrera por un puesto de elección popular para el 2025 será más clara.
¡Vaya!, hay algunos diputados locales y federales que todavía no toman posesión, y ya entraron al rejuego de la posibilidad de brincar del escaño -que todavía no tienen- a la intención de una candidatura a la presidencia municipal de su zona.
Por lo pronto, andan en la pepena de likes en redes sociales y opinan hasta de política exterior: “Las relaciones con Estados Unidos ni nos perjudican, ni nos benefician, sino todo lo contrario”, habría dicho ya alguno por ahí.
Por cierto, hay quien asegura que la marca Yunes se fue a la basura para el 2025.
La pregunta es ¿si esto incluye a Héctor Yunes Landa y a Pepe Yunes Zorrilla?
En el pasado proceso comicial miles de personas no supieron distinguir que el de Perote no era familiar de los de Soledad de Doblado.
Hay quien dice que la ignorancia electoral ya es parte de la cultura nacional.
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