Y Chincoya, primere diputade en el Congreso del Estado, guardó silencio toda la jornada tras la muerte del magistrade de Aguascalientes Jesús Ociel Baena Saucedo.
La postura del diputade jaroche era relevante en una situación como la antes descrita, en medio de un repudio a nivel nacional por el fallecimiento del magistrade, ya que ocupaba un espacio cómo el que ahora él ocupa y que se ha ganado a través de las luchas de los miembros de la diversidad sexual.
Sin duda, Chincoya queda a deber a su comunidad LGBTTIQ+, pues al parecer de la agenda que se suponía debería de representar no se sabe nada, de los crímenes de odio no ha fijado postura y ni siquiera en un momento como este enviado condolencias.
Seguramente al Ayuntamiento de Veracruz se le olvidó que, por estas fechas, se tenía contemplada la apertura de una nueva tienda departamental en El Coyol, que viene a sustituir los empleos perdidos hace algunos meses por el cierre de la anterior tienda, Famsa, que se encuentra justo en donde se realizan unas obras para instalar un colector pluvial.
El tráfico vial seguramente empañará la gran apertura, que viene a refrescar la economía local y el municipio no contempló que afectaría esta y otras cadenas de tiendas que se ubican en la plaza comercial que se ubica justo enfrente del área que se encuentra en obra, motivo por el cual están cerradas las calles que rodean a esta importante zona comercial en el Coyol.
Ahora, solo se espera que las obras terminen a la brevedad, para no afectar tanto a los empresarios que esperan con ansías una buena temporada decembrina, la mejor del año para este tipo de giros comerciales.
Una burla parece para los empleados la propuesta de contratar meseros, chefs y personal de Acapulco, cuando en Veracruz los trabajadores se quejan de los sueldos de risa que ofrecen.
Incluso el propio Marcel Van Eyck señaló que tienen al menos 500 vacantes en los negocios gastronómicos porque los veracruzanos prefieren emplearse en otros rubros donde ganen más que el sueldo mínimo.
Y es que en algunos lugares les ofrecen lo mínimo y el resto deben ganarlo a través de las propinas y no les dan prestaciones.
Además, tratándose de personal de Acapulco deberán ofrecerles hospedaje, transporte, alimentación y difícilmente un empresario se echará el paquete encima.