Ciudad de México | 2025-01-22
El gesto de Elon Musk, realizado durante la investidura de Donald Trump como presidente de Estados Unidos, desató una ola de reacciones en todo el mundo. El magnate alzó el brazo en un movimiento que ha sido interpretado como un saludo nazi.
Neonazis de diversas partes del mundo no tardaron en aplaudir el gesto, convirtiéndolo en un símbolo de su causa.
Durante su intervención, Musk golpeó su pecho y alzó el brazo derecho hacia el cielo mientras agradecía a la multitud. "Mi corazón está con ustedes. Gracias a ustedes, el futuro de la civilización está asegurado", expresó.
El movimiento quedó registrado en video y rápidamente fue interpretado como una referencia al saludo romano, vinculado históricamente con el régimen nazi.
Grupos neonazis como Blood Tribe respondieron con entusiasmo. Christopher Pohlhaus, su líder, compartió un GIF del gesto en Telegram con un mensaje que resumía su emoción: "Voy a llorar de felicidad por esto".
Usuarios neonazis en redes como X (antes Twitter) se sumaron a las reacciones, celebrando lo que consideraron una señal de apoyo al movimiento.
Elon Musk no tardó en responder a las acusaciones. Con su estilo directo, el magnate calificó las críticas de "trucos sucios" y desestimó las interpretaciones que lo vinculaban al nazismo. ""Francamente, necesitan nuevos trucos. Cansa mucho ese ataque de que todo el mundo es Hitler", dijo.
Sin embargo, la polémica ganó fuerza cuando Andrea Stroppa, un aliado cercano a Musk y asesor vinculado al gobierno italiano de extrema derecha, compartió el video del gesto en redes, etiquetándolo como un homenaje al Imperio Romano.
El saludo romano, popularizado por el régimen fascista de Mussolini y adoptado por los nazis en los años treinta, carga un peso histórico ineludible.
Según la historiadora Claire Aubin, especializada en nazismo, el gesto de Musk sí encaja dentro de este contexto. "Hay que creer lo que están viendo. Es un saludo nazi", afirmó en X.
Por otro lado, la Liga Antidifamación (ADL), una organización que combate el antisemitismo, defendió al empresario. "Parece que Musk hizo un gesto incómodo en un momento de entusiasmo, no un saludo nazi", publicó en su cuenta oficial.
El incidente no es aislado. Musk ha mostrado en el pasado simpatías hacia políticas de derecha, como su apoyo al partido ultraderechista AfD en Alemania y al británico antimigrantes Reform UK.
El gesto, intencionado o no, se suma a una larga lista de controversias que han marcado la carrera de Elon Musk. Mientras algunos lo ven como un visionario que desafía las normas, otros lo señalan como un personaje ´oscuro´ que juega con los límites de lo aceptable y hasta lo legal.