Xalapa | 2025-02-12
Ir al cine es un gusto que muchos se dan de vez en cuando, ya sea por un estreno esperado o simplemente compartir un rato divertido con la familia, amigos o pareja. Y otro de los aspectos por los que es una actividad tan popular es por las icónicas palomitas y golosinas.
Sin embargo, muchos afirman que con el tiempo se ha vuelto un gusto muy caro, entre los precios de los boletos y los productos, en especial si vas acompañado, por lo que se ha vuelto práctica común para muchos llevar su propia comida, y así ahorrar unos pesos mientras disfrutan de la película.
Pero esta práctica no es del todo bien vista por los empleados de los complejos, sobrando incluso los incidentes en los que se suscitan peleas con los clientes, llegando a prohibirles el ingreso a la sala.
Es por ello que existe la incertidumbre, independientemente de lo que estipulen los cines en sus políticas internas, si es realmente válido que se prohíba la entrada con comida ajena. La respuesta a ello la tiene la confiable Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco).
La dependencia resalta el Artículo 58 de la Ley Federal de Protección al Consumidor (LFPC) estipula que los prestadores de bienes y servicios no pueden discriminar ni condicionar la compra de productos para recibir atención.
Aunque son muchos los cines que establecen en sus normas la prohibición de alimentos externos en sus instalaciones, la Profeco concluye que esto no tiene ninguna validez legal.
La próxima vez que se te niegue la entrada al cine por llevar comida hecha en casa o de otro establecimiento, puedes informar al personal que con su restricción se está incurriendo en una práctica ilegal, así como pedir hablar con el gerente para exponer tu derecho como consumidor.
Si la negativa persiste, puedes presentar una queja ante la Profeco para solicitar su intervención, como institución protectora de los derechos de los consumidores.