Beatriz Torres Beristaín, investigadora del Centro de Investigaciones Tropicales de la Universidad Veracruzana (UV), advirtió sobre la situación de los ejidatarios en El Castillo, quienes se encuentran impedidos de extraer y vender agua proveniente de los ríos y manantiales de la zona a otros municipios.
Durante una entrevista, la investigadora recordó que los ejidatarios no tienen autorización para hacer uso comercial de los caudales de los ríos Actopan y la Antigua.
Asimismo, resaltó la importancia del caudal ecológico, que representa la cantidad mínima de agua necesaria para que un río pueda mantener un equilibrio ambiental saludable.
"No creo que se esté respetando, pero además tiene la parte negativa de que, aunque sea para consumo humano, se está vendiendo el agua, hay una cuestión de lucro y definitivamente no está correcto", declaró enfáticamente Torres Beristaín.
Recientemente, el alcalde de Banderilla, David Sangabriel, reconoció públicamente que al menos siete municipios, incluyendo a Xalapa, han enviado camiones cisterna a los afluentes de la zona de El Castillo para extraer agua y abastecer a los habitantes de ambos municipios, así como a los de Acajete, Emiliano Zapata, Rafael Lucio, Tlalnelhuayocan y Naolinco.
En cuanto al papel de los ejidatarios, quienes estarían lucrando con la venta de agua, la investigadora subrayó la importancia de presentar pruebas que demuestren que no se está causando daño al entorno natural.
"Creo que se banaliza mucho y dicen 'es agua' y esta gratuidad del agua, pues la están tomando gratis y luego lucramos con ella.
“Sí se necesita una autorización, aunque fuera agua de los ayuntamientos, no está bien que se tome sin los permisos, los deberían enseñar. Y eso debe tomar en cuenta el caudal ecológico", insistió Torres Beristaín.
La investigadora también expresó su preocupación acerca de la posibilidad de que los manantiales, en manos de los ejidatarios, se sequen debido a la falta de claridad sobre quién otorgó los permisos a los ayuntamientos para extraer agua con camiones cisterna, así como si existe un beneficio económico en este proceso.
"El agua es de la nación, no de los ejidatarios. Si ellos tienen algún permiso seguramente es para sus actividades y con un caudal determinado, no pueden disponer de ella a su antojo o hasta que se agote", enfatizó la experta.