En Banderilla, incluso menores de edad fueron agredidos por policías
En el segundo día de protestas por la falta de agua en diversas colonias de Banderilla, elementos de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) reprimieron y agredieron a los manifestantes, entre esos a un niño, por lo que estos últimos se quejaron ante la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDH).
Cabe recordar que este lunes, habitantes de Banderilla bloquearon los dos carriles de circulación de la carretera Xalapa-Puebla, exigiendo que el servicio de agua potable sea regularizado o la entrega a través de pipas tenga mayor frecuencia.
Los inconformes, habitantes de diversas zonas de aquel municipio, recriminaron que las pipas del servicio público únicamente les doten de mil litros cada diez días y las empresas privadas hayan subido casi al doble el costo, ante la pasividad del alcalde David Sangabriel, quien incluso adelantó que únicamente les darían tres cubetas por familia.
Inconformes porque el servicio no se regularizó, este martes decenas de personas volvieron a salir a las calles a protestar, pero no fueron recibidos en el Palacio Municipal ni tampoco acudió a dialogar algún funcionario público.
Y pese a que el gobernador Cuitláhuac García Jiménez afirmó que no habría represión, elementos antimotines y municipales disolvieron la manifestación frente al auditorio de La Calera, agrediendo a algunos de los presentes.
Sobre la queja ante Derechos Humanos, Alberto Contreras Maldonado, uno de los manifestantes, enfatizó que el movimiento fue pacífico y tal como se había acordado ayer una comisión de cinco personas se encaminó hacia el ayuntamiento para dialogar con el alcalde, quien no los recibió argumentando supuestas reuniones.
Dijo que entienden que la situación es compleja, por ello están dispuestos a realizar mesas de trabajo con las autoridades municipales, descartando que el movimiento tenga tintes políticos de algún tipo.
“La verdad la manera en la que nos trataron fue incorrecta. Creo que todos como personas civilizadas que somos, debe haber un respeto. No estábamos agrediendo, no estábamos alterando el orden ni ofendiendo a nadie.
“Creo que, por parte de los elementos de la policía estatal, que fue la que nos agredió, se haga algo al respecto porque nosotros no estábamos agrediendo a nadie”, dijo.
Entre quienes sufrieron de jaloneos y otros tipos de violencia se encuentra un menor de edad, quien en el cuello y tórax presenta diversas marcas de las agresiones, cuyas fotografías y pruebas fueron aportadas a la autoridad.
En medio de los gritos de los afectados, quienes afirman que la lucha es justa, los elementos estatales tiraron las cuerdas con las que los habitantes habían cerrado el paso e incluso, intimidaron a algunas mujeres con las propias patrullas.
Dicho operativo, de acuerdo con información recabada, fue encabezado por el propio subdirector de la zona centro de la SSP, con el distintivo de “comandante Alfil”.