Todo queda en familia. Estos parricidios han impactado a Veracruz

El estado de Veracruz se ha visto sacudido por  brutales crímenes cometidos en los últimos años, sin embargo, los que más han impactado a la sociedad son los asesinatos de padres a manos de sus hijos, quienes han acabado con la vida de su madre, en la mayoría de los casos, padre  o ambos a sangre fría.

Mató y quemó a su mamá

En Fortín de Las Flores, un joven mató y quemó a su mamá luego de descubrir que tenía una relación amorosa con uno de sus amigos, a quien también dio muerte.

El crimen ocurrió el  27 de septiembre del 2007, éste fue el primero de dos casos de hijos asesinos que se han suscitado en el municipio de Fortín.

En ese entonces, “Sergio N”, de 19 años de edad mató y quemó a su madre, pero también a su amigo, “Usiel N”, de 20 años, quien sostenía una relación amorosa con “Martha Patricia”, de 42 año, madre del matricida.

Los hechos ocurrieron en la esquina de la calle Malinche y privada Ixtacíhuatl del municipio de Fortín, desde entonces el culpable purga una condena de 37 años de prisión, luego de haber sido encontrado culpable, un año después, en el 2008. 

Mando a matar a su papá

Un segundo caso se suscitó en el municipio de las Flores, en el 2012, cuando las autoridades descubrieron que fue su propio hijo fue el autor intelectual de haber asesinado a “Manolo N”, de 47 años de edad,  ingeniero de PEMEX.

De acuerdo a las autoridades policiacas, “Fabián N” alías El Chayote,  fue quien sometió inicialmente a la víctima, y como ésta opuso resistencia, le asestó dos puñaladas, una en el cuello y otra en un costado. Luego, el otro agresor también con un cuchillo le dio una puñalada en el pecho, dejándolo tirado, para escapar.

En ese tiempo las autoridades informaron que el caso quedó esclarecido, y los capturados, tanto el hijo como los autores materiales, fueron enviados al penal La Toma en donde cumplen su condena impuesta  con todo el peso de la ley.

Asesinó a su madre en un consultorio dental

Otro de los crímenes que dejó perpleja a la ciudadanía fue el de Ludy ‘N’, quien fue asesinada por su hijo de 25 años de edad, el joven  permaneció con el cuerpo de su madre por unos días en el consultorio dental Norteamericana.

Muy cerca de la zona militar, conocida como La Boticaria, justo enfrente, Ludy 'N' fue asesinada por su primogénito, de acuerdo a las autoridades, desde el 5 de septiembre, sin embargo el hallazgo se hizo cuatro días después.

Nadie se imaginaría que esa noche, del 9 de septiembre, la policía iba a encontrar la fatal escena. El cuerpo de Ludy se encontraba en el consultorio dental ubicado en la avenida Ejército Mexicano, en Boca del Río, Veracruz, donde presuntamente su hijo lo dejó, luego de haberla asesinado tras una fuerte discusión.

Los vecinos del Ejido Primero de Mayo Norte fueron quienes alertaron a la policía, pues, de acuerdo con información policial, reportaron al 911 un fuerte olor proveniente de la clínica Dental Norteamericana.

Su hijo, quien se encontraba en el mismo lugar y presuntamente intentó evadir a vecinos para que no ingresaran al domicilio, fue señalado como responsable, por lo que se encuentra en prisión.

La hija del carnicero que masacró a su familia 

Yesenia Ivonne "N", ahora conocida como “La hija del carnicero” luego de que las autoridades dieran a conocer que fue quien  disparó a su padre y madre, a sus dos hermanos y sus parejas y a un sobrino menor de edad. 

Aunque en un principio fingió ser también víctima e incluso hasta heroína, al salvar a dos menores de edad, uno de ellos su hijo y una sobrina, las investigaciones terminaron por señalarla como la autora del brutal crimen de 7 miembros de su familia.

Una vivienda ubicada en el municipio de Boca del Río fue la escena del crimen cometido la tarde del 3 de julio del 2022, día de Carnaval en Veracruz, sin embargo, lejos estaba de compartir la alegría de los festejos del Rey Momo, la familia dedicada al negocio de carnicerías. Pues se sabe que al interior se vivió el mismo infierno. 

De acuerdo a los investigadores, Yesenia “N” habría sostenido una riña con sus padres, hermanos y cuñados por bienes y negocios pertenecientes a la familia, que terminó en una masacre.

Luego de dispararles, se escondió en un sitio dentro de la casa, junto con su hijo de 5 años y una sobrina de 13, hasta que llegaron las autoridades.

La mujer, de 35 años de edad, en ese momento con un embarazo avanzado, actuó como una víctima más del atentado, incluso aseguró que se había podido esconder,  junto con los menores para salvar su vida y la de ellos, argumento con el que logró, en un principio, su libertad, sin embargo, fue aprehendida un mes después en Durango.

El 2 de agosto fue capturada por el delito de homicidio doloso calificado en agravio de 7 personas: 3 mujeres, una de ellas su mamá y 3 hombres, entre los que se encontraba su padre  y un adolescente, su sobrino.