Ovidio, en la mira desde hace 6 meses, afirma la Sedena

El titular de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) Luis Cresencio Sandoval indicó que Ovidio N, hijo de “El Chapo” Guzmán estaba bajo la mira de autoridades de seguridad de Culiacán desde hace 6 meses.

Indicaron que desde el pasado mes de julio de 2022 se tenía ubicada la morada donde estaba Ovidio N, desde donde tenía su centro de operación para la construcción de la droga fentanilo, por lo que se estableció una tarea conjunta para su recaptura.

Mencionó que gracias a un trabajo de inteligencia, fue que se logró su localización, así como se creó un plan estratégico para su detención, esto en el municipio de Jesús María en Sinaloa, donde se desarrollaron este pasado jueves diversos eventos de violencia para evitar que se diera su detención.

La Sedena señaló que con el apoyo de la Guardia Nacional y el Ejército Mexicano se logró la ubicación, sin embargo, al implementar el operativo de recaptura los elementos fueron agredidos por personas armadas a bordo de aproximadamente 25 vehículos blindados.

Señaló que los agresores lograron refugiarse en tres domicilios desde donde continuaron disparando, causando la muerte de 7 militares y se tuvieron 9 personas heridas, durante los enfrentamientos que se registraron en Culiacán.

Indicó que se empleó en su recaptura un helicóptero UH-60 Black Hawk, mismo que proporcionó apoyo vía aérea a las tropas que se encontraban desde tierra repeliendo las agresiones de los sujetos delincuenciales.

Como parte de los resultados obtenidos, Luis Cresencio Sandoval indicó que Ovidio N, alias “El Ratón” fue trasladado en una aeronave de la Fuerza Aérea Mexicana desde Culiacán hacia la Ciudad de México, donde fue puesto a disposición de la Fiscalía Especializada en materia de Delincuencia Organizada (FEMDO).

Indicó que se notificó que se cumplió con una orden de detención con fines de extradición que mantiene la Interpol México contra Ovidio N, hijo de “El Chapo” Guzmán, donde la tarde-noche de este jueves fue internado en el CEFERESO número 1 de Almoloya de Juárez, en el Estado de México, una de las sedes conocidas como el penal de máxima seguridad del Altiplano.

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