Recientemente, se ha registrado un incremento en el número de casos de COVID-19 y otras enfermedades respiratorias, de acuerdo con datos de la Secretaría de Salud.
En nuestro país ya fueron detectadas dos nuevas variantes ante el repunte de casos de COVID-19, las cuales están relacionadas con la familia ómicron. Estas variantes, denominadas KP.2 y KP.3, han sido identificadas a través de la plataforma GSAID (Global Initiative on Sharing All Influenza Data).
Las variantes KP.2 y KP.3 son consideradas más contagiosas que otras cepas, lo que genera preocupación por el posible aumento de contagios y riesgo de hospitalizaciones.
Hasta el momento, se registran ocho casos asociados a la variante KP.2 y un caso relacionado con la variante KP.3, según la vigilancia del Instituto Nacional de Medicina Genómica (Inmegen) y el Instituto Nacional de Enfermedades Respiratorias (INER).
El paciente contagiado con la variante KP.3 es un hombre de 50 años procedente de Estados Unidos que llegó a la Ciudad de México a mediados de junio. Los casos de la variante KP.2 también corresponden a pacientes con antecedentes de haber viajado recientemente a Estados Unidos.
Los síntomas de las variantes KP.2 y KP.3 son similares a los de ómicron, e incluyen tos, fiebre, dificultad respiratoria, fatiga, dolor de cabeza y muscular, dolor de garganta y pérdida del gusto y el olfato. Sin embargo, algunas personas infectadas podrían no mostrar ningún síntoma.
De acuerdo con datos del Sistema de Información de la RED IRAG, al menos 19 hospitales están saturados con una ocupación del 50% o mayor para la atención de enfermedades respiratorias hasta el 15 de julio. Entre ellos:
Este aumento en los contagios y hospitalizaciones subraya la importancia de mantenerse informado y seguir las recomendaciones de salud pública.