En México, durante la pandemia se registró un 52% de denuncias por fraudes bancarios realizados principalmente mediante llamadas telefónicas, mensajes vía SMS y correos electrónicos, según datos revelados por la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef).
Cabe destacar que en la mayoría de los casos las Instituciones Financieras no cubren lo perdido, siendo el usuario el único perjudicado por los estafadores.
Condusef dio a conocer una nueva forma en que los delincuentes hackean las Terminales Punto de Venta sin que los dueños del comercio sospechen, pues se hacen pasar por empleados de dicho punto, y mediante un malware clonan los datos de las tarjetas con que los clientes paguen.
Comienza cuando los presuntos estafadores, haciéndose pasar por personal de las instituciones financieras, envían mensajes aparentemente auténticos a las empresas o pequeños comercios informándoles de una actualización del sistema de la terminal punto de venta (del ordenador, no del lector de tarjetas físico), para lo cual le solicitan acceso remoto a la terminal, infectando la máquina a distancia.
Una vez instalado el malware, los ladrones pueden ver las transacciones efectuadas con tarjetas, interceptarlas, capturar la información e incluso redirigir los datos de las tarjetas a un servidor externo, pudiendo conseguir los siguientes datos: