El acceso a Internet es cada vez más habitual y de una mayor calidad en todo el territorio mexicano. Como es lógico, los avances tecnológicos siguen produciéndose y eso se traduce en mejores conexiones.
Uno de los avances que permite que la red cada vez funcione mejor en todo el país es la aparición de las VPN, un concepto que puede que ya hayas escuchado en alguna ocasión y que ahora vamos a explicar.
Las VPN (virtual private network) son, como su propio nombre en inglés indica, redes virtuales privadas. ¿Qué quiere decir esto? Que al conectarte a Internet a través de una VPN lo estarás haciendo de una forma mucho más segura que si lo hicieras a través de una red pública. En este tipo de conexiones, los datos que se envían mediante el uso de un servidor entre tu dispositivo de acceso y las páginas de destino están cifrados, es decir, están encriptados para aportar un plus de seguridad en cada intercambio de información.
La asignación de la dirección IP es el dato que se utiliza en Internet para determinar en qué ubicación exacta se encuentra el dispositivo que se ha conectado a la red. Normalmente, cuando te conectas por ejemplo en el D. F., la IP del dispositivo viene a corroborar que estás navegando desde México. Gracias a la VPN Star Plus o a otra similar, la IP se puede falsear y puedes escoger una IP de un país diferente: España, Estados Unidos, Francia, Canadá...
Evitar la geolocalización te permite acceder a contenidos que no están disponibles en el lugar en el que te encuentras o acceder a contenidos y portales prohibidos. Si, por ejemplo, estando en México quieres acceder a una serie que solo está disponible en el catálogo de Netflix de Estados Unidos, pero no en el de Netflix México, a través de una VPN podrás conectarte con una IP estadounidense y así ver sin problemas esos capítulos que aún no han llegado a México.
O si estuvieses en un país como China, en el que el acceso a portales como Facebook está prohibido, con una VPN y una IP de un país diferente a China podrías entrar en tu perfil de Facebook.
Establecer un túnel de datos en la conexión dificulta en gran medida que los piratas informáticos puedan conseguir la información que dejas durante tu navegación. Por el contrario, las redes públicas son un objetivo predilecto de los hackers, ya que envían datos con niveles de protección muy débiles, por lo que es fácil interceptarlos. En cambio, la información transmitida a través de una VPN supone un trabajo arduo que termina siendo disuasorio para los ciberdelincuentes.
Crear una red privada permite que tú como trabajador puedas acceder a esa red desde cualquier parte del mundo, ya que se establece un túnel de datos, un intercambio de información cifrado que queda al margen de terceras personas. Utilizar una VPN es muy útil a la hora de poder realizar trabajo en remoto, puesto que contribuye a salvaguardar la información de la empresa.