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Flores de nochebuena: ¿cuál es la forma correcta de cuidar estas plantas?
¿Cómo cuidar tus nochebuenas para que brillen más allá de la Navidad?, te contamos
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Cuando diciembre toca a la puerta, las nochebuenas se convierten en protagonistas de la decoración navideña, llenando de color y alegría nuestros hogares. Sin embargo, su belleza no tiene por qué limitarse a un solo mes del año. Con los cuidados adecuados, estas plantas pueden mantenerse saludables y adornar tus espacios durante mucho más tiempo, por lo que te recomendamos cuales son los pasos a seguir para que lleguen 'sanas y salvas' hasta la próxima Navidad ¡checa!
¿Cómo cuidar tus flores de nochebuena?
- Considera el espacio ideal para tus nochebuenas
El lugar donde ubiques tus nochebuenas es crucial para su bienestar. Estas plantas necesitan luz abundante pero indirecta; por ello, colócalas cerca de una ventana luminosa, pero sin exponerlas directamente al sol, ya que sus hojas pueden quemarse. Además, mantenlas en un ambiente con temperaturas estables entre 15 y 25 grados Celsius, evitando corrientes de aire y cambios bruscos de temperatura.
- El arte del riego
Un riego adecuado es esencial para evitar que las raíces se pudran. Antes de regar, verifica que la tierra esté seca al tacto. Asegúrate de dirigir el agua hacia el sustrato y no sobre las hojas, ya que el exceso de humedad puede propiciar hongos y otros problemas. Si estás en un clima seco, también es recomendable humedecer el ambiente, pero sin saturar la planta.
Aunque muchas personas desechan sus nochebuenas al terminar las fiestas, estas plantas pueden vivir varios años si reciben los cuidados necesarios. Tras la temporada navideña, pódalas ligeramente para estimular nuevos brotes y aplica un fertilizante líquido para plantas de floración una vez al mes durante la primavera y el verano. Mantenerlas en una maceta con suficiente espacio o trasplantarlas al jardín puede favorecer su desarrollo.
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Consejos para un trasplante exitoso
Si decides trasplantar tus nochebuenas, elige una maceta ligeramente más grande con buen drenaje. En caso de llevarlas al suelo, asegúrate de que la temperatura de la tierra sea superior a los 18 grados Celsius y selecciona un espacio con luz solar moderada y protegido del viento. El riego debe ser constante pero sin encharcar, idealmente cada tercer día.
El distintivo color rojo de las nochebuenas no es solo un regalo de la naturaleza, sino también el resultado de cuidados específicos. Durante varias semanas antes de Navidad, coloca la planta en un lugar donde reciba al menos 10 horas de oscuridad completa cada noche. Esto estimulará la producción de los pigmentos rojos que hacen tan especial a esta flor.
Con un poco de atención y dedicación, tus nochebuenas pueden convertirse en un elemento permanente de tu jardín o de tus espacios interiores, llenando de vida y color tus días durante todo el año.
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