Los taxistas de la región de Orizaba enfrentan una crisis económica ante la falta de actualización en las tarifas oficiales de servicio, señaló Jairo Guarneros Sosa, representante del Grupo Independiente de Taxistas de Orizaba (GRITO).
"Hace más de 20 años que las tarifas no se revisan, mientras que los costos de operación, como combustible y refacciones, no dejan de aumentar. Esta situación es insostenible", afirmó.
Expresó preocupación por la falta de respuestas concretas de la nueva administración estatal, con la cual se espera un cambio de relación o por lo menos que haya relación.
El líder gremial señaló que la tarifa mínima en Orizaba, aunque oficialmente está desfasada, ha sido ajustada informalmente a 35 o 40 pesos por necesidad.
Además, urgió al gobierno estatal a establecer mesas de diálogo con los representantes del sector para abordar este problema de manera justa y transparente.
"Los taxistas necesitamos que nuestras voces sean escuchadas y que se tomen medidas para garantizar la viabilidad del servicio sin perjudicar a los usuarios", concluyó.