Dónde está la consideración y la clemencia a los ciudadanos, amenazados de todos lados y ahora la autoridad a qué los vehículos con placas de circulación de los pasados gobiernos, no podrán andar circulando a partir del primero de enero del 2023.
Después de la peor pandemia en la historia del planeta, de una guerra de efectos desbastadores y de una crisis galopante también histórica, los dueños de automóviles esperan un milagro y la consideración del gobernador del estado, para que se amplíe el paso para cumplir con esta obligación todo el año 2023 y se den las mayores posibilidades al pueblo y se cumpla ese slogan presidencial de que primeros los pobres.
Los vehículos son para llevar a los niños a la escuela y los padres de familia para ir a trabajar.
Que tanto es tantito y sin problema el 2024 a darle duro al proceso electoral con el reconocimiento al mandatario veracruzano. Así las cosas.