La Oficina en México del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos calificó como un paso positivo la reunión sostenida entre la gobernadora de Veracruz, Rocío Nahle García, y los colectivos de familiares de personas desaparecidas.
El primer acercamiento, realizado el lunes en la capital del estado, busca atender las demandas de las víctimas y trazar una hoja de ruta que permita avanzar en la búsqueda de justicia y reparación.
¿Qué significa este encuentro para las víctimas? Alan García Campos, coordinador de la Unidad de Graves Violaciones a los Derechos Humanos de la ONU, destacó que esta reunión marca un avance en el diálogo entre las autoridades y las familias afectadas, aunque subrayó que el éxito dependerá de la concreción de acuerdos claros.
Las familias, que por años han exigido respuestas ante la crisis de desapariciones, ven en esta reunión una oportunidad para que sus voces sean escuchadas.
No obstante, persisten asuntos urgentes, como evitar la revictimización, prevenir nuevos casos y garantizar justicia.
En su intervención, García Campos hizo énfasis en los pendientes que enfrenta el estado en materia de derechos humanos.
No se ha logrado devolver a las familias a sus seres queridos ni garantizar que no haya impunidad en las desapariciones, señaló.
La reunión coincide con el Día Internacional de los Derechos Humanos, lo que le dio un significado especial al diálogo. La ONU expresó su confianza en que este primer acercamiento pueda traducirse en compromisos concretos que generen un cambio significativo en las políticas de atención a las víctimas.