Palaperos y restauranteros de la zona de playas en Tuxpan no solo han tenido que lidiar con los estragos del COVID-19, sino también por arbitrariedades de la Comisión Federal de Electricidad (CFE) y los elevados cobros, que muchos no han podido pagar.
Esto ha derivado en que incluso algunos se hayan quedado sin el suministro, luego que la Comisión acudiera a realizar el corte por la falta de pago.
Antonio Ríos, representante de este sector, expuso que la situación es complicada en materia económica, ya que los ingresos continúan siendo mínimos pero los gastos de servicios como el de la luz continúan.
Incluso, éste subió en últimos meses, situación que al momento es impagable, pues los palaperos no tienen los suficientes recursos económicos para cumplir con dichos pagos.
"Muchos compañeros no han podido pagar las facturas de este servicio y aunque hay prórrogas no son suficientes, no hay muchos ingresos y la situación económica es difícil", acotó.
Aunado a ello se enfrentan a la poca presencia de turistas, pues la situación actual por la contingencia sanitaria no está controlada, lo que sigue dejando pérdidas económicas para este sector.