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Niños de preescolar recorrieron las calles de Misantla, vestidos con disfraces alusivos a la primavera
La llegada de la primavera fue celebrada con gran entusiasmo en Misantla, donde más de un centenar de niños de preescolar recorrieron las calles de la ciudad ataviados con vistosos disfraces de animalitos, aves e insectos, la alegría y ternura de los pequeños iluminaron el trayecto, mientras ciudadanos los recibían con sonrisas y aplausos, disfrutando de una de las tradiciones más coloridas de la temporada.
El desfile contó con la participación de alumnos de los jardines de niños CAIC, Manuel Michaus, el CAM, Gregorio Torres Quintero y Lauro Aguirre, quienes con gran emoción desfilaron acompañados de sus maestros y padres de familia, entre los contingentes destacó la presentación de Cortes Reales de la Primavera, compuesta por niños caracterizados como reyes y reinas de la estación, así como un carro alegórico adornado con flores y elementos alusivos a la naturaleza, que añadió un toque especial al evento.
El recorrido inició en la Plaza de la Concordia, donde los pequeños se reunieron para dar comienzo a la celebración, a lo largo de aproximadamente una hora, avanzaron por las calles principales de la ciudad, llenando de vida y color cada rincón con sus disfraces y sonrisas, durante todo el trayecto, elementos de la Policía Municipal, autoridades viales y paramédicos estuvieron atentos para garantizar la seguridad de los participantes y asistentes, reportando un saldo blanco al finalizar la jornada.
Este desfile no solo representa una festividad escolar, sino también una oportunidad para que la comunidad celebre la llegada de la primavera y promueva valores como la creatividad, la convivencia y el respeto por la naturaleza, la participación activa de los menores, junto con el apoyo de las instituciones educativas y de seguridad, refuerza la importancia de preservar las tradiciones y fomentar el sentido de identidad entre las nuevas generaciones.
Misantla, una vez más, demostró que la primavera no solo es el renacer de la naturaleza, sino también una oportunidad para fortalecer los lazos comunitarios y llenar de alegría sus calles.