Uno de los propósitos más comunes cada que inicia un nuevo año se relaciona directamente con las finanzas. Mejorar la propia estabilidad económica y tener una mayor solvencia es un objetivo vital todos los años, y muchos buscan le mejor manera de cumplirlo.
Decir que la mejor solución es “ahorrar” es fácil, pero llevarlo a la práctica es un desafío. No obstante, sobran las formas de llevarlo a cabo, y todo se puede reducir en una buena planeación y estrategias efectivas.
Si tu plan para el 2025 es construir un fondo de ahorro que te saque de apuros, te brinde una mayor estabilidad o te sirva para un gustito hacia el fin del siguiente año, estás en el lugar indicado, pues aquí te brindamos cinco consejos que obtuvimos al preguntarle a ChatGPT.
Define bien tu presupuesto considerando los ingresos fijos que recibes, y los que pueden variar. En cuanto a tus gastos, separa los esenciales de los opcionales, identifica lo que inviertes en tus hábitos de consumo y prioriza tus necesidades.
Según la Profeco, destinar un porcentaje fijo de tus ingresos a tu ahorro personal y a imprevistos es clave para evitar endeudarte por situaciones inesperadas.
Considera opciones como cuentas bancarias con intereses, Sociedades Financieras Populares (Sofipos), o invierte en Cetes y tu Afore, no te limites a sólo ahorrar en efectivo. Así puedes proteger tus ahorros de la inflación.
Hay gastos que parecen inocentes por lo pequeños que son, pero si se hacen a diario, semanal o mensualmente como snacks, cafés o suscripciones que no utilizas, pueden acumularse significativamente.
Identifica esos gastos que te agujerean la cartera poco a poco, y redúcelos tanto como puedas.
Antes de realizar cualquier compra, la principal pregunta que debes hacerte es si esta es realmente necesaria. Incluso si lo es, debes realizarla inteligentemente. Eventos comerciales como el Buen Fin son una buena alternativa para aprovechar descuentos.
En cuanto a las deudas, además de reducir gastos hormiga, debes evitar meterte a planes de pago que quizá no puedas afrontar a largo plazo, como lo son las tarjetas de crédito, que necesitas tener bien definido si puedes liquidarlas.
A corto plazo, parecerán no significar demasiado, pero a largo plazo pueden juntarse en un colchón sólido. Si guardas monedas de 1, 5 o 10 pesos, se irán juntando y al final del año podrían sorprenderte sacándote de un apuro o siendo de utilidad para algún gasto adicional. Un método simple, pero inquebrantable.