La escasez de agua en México ha desencadenado una serie de repercusiones, y una de ellas se manifiesta en el sector de las lavanderías, donde los usuarios han experimentado un aumento significativo en los precios del servicio.
Esta situación, impulsada por la crisis hídrica que afecta al país, ha generado malestar entre los consumidores y ha puesto de relieve la necesidad de encontrar soluciones a corto y largo plazo.
En los últimos tiempos, las redes sociales se han inundado con quejas de usuarios de servicios de lavandería, quienes reportan incrementos en los precios y dificultades para acceder al agua necesaria para sus operaciones.
La falta de suministro hídrico, incluso en entidades como Hidalgo, ha exacerbado la situación, llegando incluso al punto de reportarse casos de robo de agua.
Santiago Hernández Becerril, secretario general de la Cámara Nacional de la Industria de Lavanderías (Canalava), ha señalado que, aunque muchas lavanderías no dependen directamente de la red hidráulica, la crisis del agua ha impactado en el sector.
El aumento en la demanda de pipas de agua ha llevado a un encarecimiento del servicio y a casos de escasez, afectando tanto a los propietarios de las lavanderías como a sus clientes.
Este aumento se debe en gran medida al encarecimiento del suministro de agua y al aumento en el costo de las pipas, que ahora pueden costar entre mil 300 y mil 800 pesos por pipa de agua.
Además del impacto en los precios, la crisis del agua también ha destacado la necesidad de promover el uso de tecnologías más eficientes en el sector de las lavanderías.
Los equipos profesionales de lavandería pueden ahorrar entre un 60% y un 70% del agua utilizada en el hogar, lo que los convierte en una opción más sostenible y rentable a largo plazo.