Kylian Mbappé ya es jugador del Real Madrid, incluso ya celebró su primer gol y su primer título con el equipo blanco; sin embargo, cuando parecía que la novela del atacante francés con el PSG había llegado a su fin, el delantero inició un nuevo capítulo al llevar ante la Ligue 1 y la UEFA el litigio que mantiene con su ex equipo.
La disputa se remonta hasta hace más de un año, en el verano de 2023, cuando Mbappé confirmó que no renovaría su contrato con el equipo de la capital francesa, el cual expiraría en junio de 2024.
Este hecho disparó las especulaciones de lo que hoy es una realidad: la llegada del francés al Real Madrid, y un punto a destacar es que, con la expiración de su contrato, el conjunto merengue ficharía al delantero sin pagar un solo centavo.
Esta situación presumiblemente no fue del agrado del PSG y, en lo que muchos interpretaron como un castigo, el francés fue excluido de la pretemporada y los entrenamientos del equipo, hasta que habría aceptado renunciar a una prima de fidelidad para que el club no resultara perdiendo económicamente con su salida.
Sin embargo, hace apenas unos días, Mbappé comunicó a la Liga de Fútbol Profesional de Francia, así como a la UEFA su reclamación de múltiples pagos que el PSG le adeuda.
El equipo ha sostenido que todo ese dinero corresponde al compromiso que asumió el atacante de renunciar a hasta 80 millones de euros en primas y salarios en caso de abandonar el club como agente libre; sin embargo, este compromiso nunca se materializó formalmente.
Mbappé se amparó en un artículo de la Carta de Fútbol Profesional que estipula que los clubes deben pagar a sus jugadores a más tardar el último día de cada mes, y cualquier impago prohibiría al equipo fichar jugadores hasta regularizar su situación.
De proceder la denuncia del francés, el club parisino enfrentaría sanciones como la prohibición de fichar jugadores durante un mercado de transferencias, o la pérdida de su licencia UEFA, lo cual le impediría participar en la próxima Champions League.
La relación entre el delantero y el presidente del PSG, Nasser Al Khelaifi, se deterioró significativamente desde que el actual jugador madridista confirmó su salida del club en febrero de este año, y este nuevo capítulo en la novela ratifica que la relación está completamente rota.