Causó ruido en el medio político la denuncia que a través de su cuenta de Twitter hizo el martes la señora Rosa Borunda; hizo ruido, además, porque es esposa del exgobernador Fidel Herrera Beltrán y madre de Javier Herrera Borunda, delegado del CEN del PVEM en el Estado.
La expresidenta del DIF-Estatal Veracruz publicó: “Quiero manifestar mi inconformidad por la subasta de candidaturas en el @PRIVeracruz_ En Xalapa votaré por @ahuedricardo no por Morena! Voto razonado!”.
La señora es la única esposa de un exgobernador que participa en la vida pública del Estado, como lo confirma su tuit, además de que se mantiene activa en su militancia partidista (las demás esposas, que viven, lógicamente, de exgobernadores, terminando la gestión de sus esposos se retiraron a la vida privada).
Nunca antes en la historia política de Veracruz una persona de su nivel había hecho una denuncia en forma pública tan seria como la que formuló, que eso que señaló, siempre, sottovoce(en voz baja, en secreto), en los corrillos políticos se ha venido comentando que sucede, pero sin que nadie haya aportado una prueba jamás.
De modo que, según ella, en el PRI estatal están subastando candidaturas. Me parece impropio y temerario de su parte, como militante tricolor que es, que siembre la duda de la deshonestidad sobre la dirigencia de su partido, e irresponsable que, sabiendo lo que está pasando, no ayude a limpiar la presunta corrupción que se estaría dando, no ofreciendo datos concretos que ayuden a ubicar a los presuntos responsables, para que la militancia priista haga la denuncia formal correspondiente.
¿Cuántas candidaturas sabe que han subastado? ¿De qué distritos o municipios? ¿En cuánto de dinero? ¿Quiénes van a ser candidatos porque “compraron” su candidatura? ¿Quiénes de la dirigencia estatal o nacional del PRI se las ofrecieron? Ojalá y la señora acabe con la tarea que inició. Le hará un gran favor a su partido y a la democracia en Veracruz.
La Nena de la Reguera, contra mercachifles de la política
La empresaria Dulce María de la Reguera, “La Nena”, precandidata de Morena a la alcaldía de Boca del Río, crítico a alcaldes y diputados que solicitaron licencia para contender por otro puesto de elección popular (por otro hueso), entre los cuales se encuentra un buen número de sus compañeros de partido.
La señora dijo que esa práctica es “un relajo”, “antiprofesional” y “antipolítica”. Se pronunció porque cualquier autoridad termine el cargo para el que fue elegida y que los diputados que solicitaron licencia, si no ganan, que ya no regresen; dijo que son unos vividores del erario.
Tiene razón, pero nadie la va a escuchar y menos a hacer caso. Eso ya se volvió una práctica habitual y, en efecto, con alguna que otra excepción, todos van por las jugosas “dietas” (sus sueldos o pagos), a vivir del presupuesto y a gozar de todas las canonjías que otorga el cargo. Esa es una triste realidad.
Que se recuerde, solo ha habido una excepción: la de el entonces diputado local José Francisco Yunes Zorrilla, “Pepe” Yunes, quien en 2006 solicitó licencia para ir a jugar como candidato a senador. Perdió, pero ya no regresó a su curul y dejó que terminara el periodo su suplente.