A sus 85 años, busca llegar a 35 años en dirigencia del Sindicato Ferrocarrilero
Como buen líder interviene por ferrocarrileros borrachos
Si no hay sorpresas de última hora y seguramente no las habrá, el insigne paisano veracruzano, Víctor Flores Morales, seguirá al mando del Sindicato de Trabajadores Ferrocarrileros de la República Mexicana (STFRM) por seis añitos más.
Así, con estos seis años adicionales, don Víctor acumulará 35 años en el poder. ¡Vaya, ni el mole dura tanto en la olla!
Ayer andaba aquí por Coatzacoalcos y se reunía con sus huestes en el Club Britania.
Este líder sindical que a sus 85 años, es ya parte de esa exclusiva lista de dinosaurios del sindicalismo nacional, esos que ni el meteorito más poderoso ha logrado extinguir.
Claro, salvo honrosas excepciones como la de Joaquín Hernández Galicia, alias "La Quina", que sí fue derribado, pero ya sabemos que no todos corren con esa suerte.
Ahí está don Víctor, compartiendo honores con Fidel Velázquez, quien estuvo al frente de la CTM por medio siglo. Este último solo dejó el puesto porque se fue a hacer fila al más allá a los 97 años.
¡Eso sí es ser terco! Y cómo olvidar a Francisco Hernández Juárez, quien lleva 47 añotes en el Sindicato de Telefonistas, casi igual de eterno que las cuentas del bar en carnaval.
Y claro, la famosa maestra Elba Esther Gordillo, quien se mantuvo en el poder del SNTE por 23 años hasta que, por azares del destino, acabó en el tambo en 2013.
La lista de líderes sindicales eternos no estaría completa sin mencionar a don Joaquín Hernández Galicia, "La Quina", quien perdió el control del Sindicato de Trabajadores Petroleros de la República Mexicana (STPRM) en 1989 por motivos similares a los de la maestra Gordillo.
Su sucesor, Carlos Romero Deschamps, mantuvo el trono por 31 años hasta que decidió renunciar, seguramente porque ya se había cansado de tantos ajetreo$$$$$$. Luego viajó al más allá.
Pero volvamos a don Víctor, que, con sus 29 años al frente del STFRM, busca sumar otros seis.
Y ahí lo tienen, paseándose por Tampico para presenciar un evento deportivo. Porque, claro, hay que mantener la buena forma.
Este líder ferrocarrilero, nacido un 6 de marzo de 1939, tiene una carrera más larga que la carretera transístmica.
Desde que asumió la dirigencia nacional en 1995, ha pasado por más cargos que un bolillo por la mesa del desayuno. Ingresó al sindicato en 1975 y desde entonces ha sido de todo: jefe de sección, coordinador, tesorero, secretario general, y quién sabe cuántos títulos más.
Don Víctor también tiene su carrera política, como buen veracruzano multifacético. Ha sido diputado federal, senador suplente, y ha ocupado diversos cargos en el PRI, ese partido que ya casi parece leyenda urbana. ¡Un verdadero todoterreno!
En febrero pasado estuvo en la Unidad Deportiva de Tampico, celebrando los 91 años del STFRM, don Víctor fue recibido como héroe. Entre empujones y vítores, la gente gritaba "seis años más, don Víctor va". Y cómo no, si lleva más de 6,500 firmas de respaldo para su reelección. ¡Vamos, ni las tandas del barrio tienen tanto apoyo!
En su gira por Orizaba, hace un par de días, don Víctor reinstaló a siete trabajadores que habían sido cesados por problemas con el alcohol. Con ese tono campechano y bonachón, les dijo que no reincidieran y que dieran más del cien por ciento en su trabajo.
"Cuiden su chamba, muchachos, y lleguen enteritos a casa", les aconsejó. Y es que en Veracruz, la familia es primero, y el trabajo también, pero siempre con responsabilidad, aunque a veces el espíritu fiestero quiera otra cosa.
En su visita a la Unidad Deportiva "Víctor Flores Morales", mejor conocida como "Martín Cuburo" (por razones que solo él entenderá), el líder sindical reafirmó su compromiso con los ferrocarrileros y pidió a la familia sindical que acudan a votar el 25 de agosto. ¡Porque la democracia sindical también necesita de su "ajúa"!
Acompañado por dirigentes de diferentes estados, don Víctor enfatizó que el sindicato ferrocarrilero es uno de los más fuertes de México gracias a su "unidad". Y así, con esa mezcla de carisma y firmeza que solo un buen jarocho tiene, don Víctor sigue adelante, sumando años y anécdotas.
Así que, mis queridos lectores, ahí tienen a don Víctor Flores Morales, el líder sindical que, cual agave en la sierra, sigue firme y dispuesto a seguir otros seis años más. Por lo pronto no hay quien lo tumbe.