El avance económico en tiempos de la 4T

Nadie se esperaba tan rápido el milagro mexicano en tiempos de la Cuarta Transformación con el presidente Andrés Manuel López Obrador, lo que produce escozor entre adversarios y enemigos políticos.

Mientras, se da el crecimiento económico anhelado que en años pasados nunca se pudo alcanzar por tener crecimiento, pero negativo.

Ahora, la economía mexicana va en un éxito inesperado por lo rápido de los resultados y la ecuación es simple, cero manos libres a funcionarios públicos y poco a poco un nuevo orden jurídico de cero impunidad y cero corrupción, con sus excepciones por supuesto.

El desarrollo nacional, sin endeudamiento externo o interno, habla de finanzas sanas y un nuevo estilo de gobernar.

La nueva cotización del peso frente al dólar gana terreno y el crecimiento de las exportaciones también en forma histórica.

El fin de las pérdidas económicas por la sustracción de ductos de diésel, gasolina y gas, son parte de ese gran avance.

Pero, es necesario que aún se superen algunos detalles que frenan ese desarrollo exponencial ante un crecimiento abrumador de la economía y que esta generando cuellos de botella en el puerto de Veracruz a causa de que en la Aduana, no han podido atender esa enorme demanda de servicios que detiene exportaciones e importaciones, sobre todo en el área de la industria automotriz y del transporte de combustibles, son largas filas de vehículos los que esperan horas para pasar al recinto portuario y por eso muchas quejas.

También, en Pemex quedan rezagos de la corrupción de antes y como ejemplo dos estaciones de servicio en Veracruz y Boca del Río, listas para operar en la calle de Dos Bahías de la colonia Río Medio y en la calle Lázaro Cárdenas en la colonia Revolución de Boca del Río, por demás de forma extraña tienen más de un año que no han podido comenzar a operar esas gasolineras afectando a la gente del pueblo, porque se trata de zonas populares y se desatiende.

Y luego la duda de que la paraestatal está frenando el gran desarrollo en la 4T y sobre todo el empleo con inversión de la iniciativa privada que genera movilidad y confianza en el gobierno federal encabezado por el político tabasqueño.

Además, en muchas instalaciones de Petróleos Mexicanos a simple vista se ve el deterioro por falta de mantenimiento, que ni las bardas pintan, como las de la zona deportiva en la colonia petrolera de Boca del Río en donde estará el Banco del Bienestar, y la del Sardinero, no les dan ni un brochazo.

Hace falta una faena de la sección 9 del STPRM, que por cierto dicen que no hay plazas para cubrir ni por defunción de un trabajador, y niegan las fichas a los familiares que siguen en el escalafón por sus derechos laborales.

Precisamente, el presidente AMLO sabe que poco a poco se están atendiendo rezagos y más en Pemex y las Aduanas, que no han podido con ese gran desarrollo del milagro mexicano, que ya es ejemplo de el orbe y genera nuevas inversiones para hacer crecer el empleo, y en conjunto con todos los factores de la producción.

Y hablando de producción de hidrocarburos en otros tiempos se preguntan ¿dónde quedó el dinero de la súper producción de crudo?

Y que tuvieron hasta más de tres millones de barriles diarios con la consabida venta de exportación y ahora con un millón 817 mil bld, aunque se presenta una baja sensible por los ingresos de la venta de crudo a la economía, y aún así se está mejorando crecimiento en ese rubro en el país por el desarrollo del turismo y de otros sectores públicos y privados.

México dejó de tener una economía petrolizada. Porque también, hay que decirlo ahora las finanzas en Pemex están controladas y sin el endeudamiento como se hacía en gobiernos pasados.

Sin necesidad de hablar de los programas sociales de bienestar y del campo, el gobierno de AMLO sigue avanzando con todo y las obras del aeropuerto Felipe Angeles, el Tren Maya y la Refinería de Dos Bocas. Y no hay quien les quite la continuidad en el 2024, que estará disputada, pero la gente esta contenta y la plutocracia asfixiá.

Además, de que en el Noticiero de Milenio Televisión con Azucena Uresti, dio los porcentajes reales de afiliación de los partidos políticos con un crecimiento en Morena de más del 600 por ciento, con un registro superior a los dos millones 300 mil militantes.

PRI con un millón 400 mil militantes, el PRD sobre 990 mil, el Partido Verde, es la revelación con 592 mil militantes, el PT con 473 mil y Movimiento Ciudadano con 384 mil militantes y el PAN es el único partido que registra un promedio negativo de menos 200 mil, lo que indica que la dirigencia de Marko Cortés, está fallando y va a la baja al contrario de Alito, que lleva al priismo por buen rumbo.

Claro está, que en la unidad de la Alianza por el Frente, los números casi se emparejan con Morena, lo que significa que hay tiro democrático para el 2024 por la presidencia del país, con un cierto sesgo de empate técnico por decidirse en las urnas por la presidencia y en los muchos cargos de elección popular a disputarse y gobiernos estatales, sobre todo.

Y con eso, el Marqués de Macuspana, por lógica se pone nervioso y le gana la ansiedad por los números fríos de la actividad política, y de un futuro Incierto en donde no todos sus correligionarios han trabajado a su ritmo de “mata caballo” y de no parar ni para tomar vuelo. Andale.

Vaya un amplio reconocimiento a todos los funcionarios públicos, que sin distinción de colores partidistas cumplen con su misión laboral. Así las cosas.