Andan bien ardidos los candidatos de la oposición “Fuerza y Corazón por Veracruz”, por la decisión que tomaron miles de ciudadanos veracruzanos y llevaron a cabo en las urnas el pasado domingo 2 de junio.
Resulta que la “altruista” e “influencer” camaleónica, Sofía Yunes Gamboa, quien era de Movimiento Ciudadano (MC) y en últimas fechas se fue con sus parientes al Partido Acción Nacional (PAN), inició una campañas en sus redes sociales para ya no apoyar a los damnificados por los desastres naturales, ni dar propina a los “cerillitos” que honradamente sí trabajan en los supermercados y hasta los meseros, todo por el voto masivo y arrasador de Morena en las urnas.
Por acciones como estas, todavía se ponen a dudar el por qué cada tiempo electoral van más en decadencia. Tal vez a ellos se les borra la memoria porque en cada elección brincan más que conejos de campo de partidos políticos, pero al pueblo no, y el resultado lo vimos el 2 de junio.
Ojalá que el pueblo se acuerde de esta campaña que varios de la oposición iniciaron en redes sociales, para que se lo vuelvan a cobrar en las elecciones que sean necesarias.
Empresarios veracruzanos se pronunciaron porque, los gabinetes de las nuevas administraciones cuenten con perfiles competentes.
Dijeron que se necesita integrar equipos de trabajo robustos y experimentados, capaces de enfrentar los retos económicos y sociales que atraviesa el país.
Externaron su preocupación por el impacto que tendría en la economía y el desarrollo regional la selección de funcionarios que no tengan la preparación adecuada.
Dijeron que no se trata solo de cumplir con cuotas partidistas, sino de elegir a los mejores para cada área, asegurando así una gestión eficiente y efectiva.
Este año la colecta de la Cruz Roja Mexicana, en la delegación Veracruz, no llegó a la meta como en otros años. Tal parece que la ciudadanía ya no ve redituable apoyar a la institución.
Muchos ciudadanos señalan que la Cruz Roja ya se volvió una clínica privada, pues ha incrementado sus costos de manera general.
Otra situación que podría haber negado la cooperación para la benemérita institución, sería la tardía atención de las unidades cuando hay un accidente, pues en ocasiones denuncian los afectados que tardan hasta una hora en acudir o de plano nunca llegan.
Estos y otros motivos pueden ser la causa de que este año la colecta no haya sido la esperada, sin embargo, la Cruz Roja continúa con sus programas sociales para la población más vulnerable de la región y acude a la ayuda cuando nadie más lo hace. Esperemos que vengan mejores tiempos para la institución de gran beneficio social.