La nueva administración estatal continúa con los cambios en Veracruz, tocando ahora a los centros deportivos importantes de la entidad, pues ahora solo serán usados para lo que fueron hechos, justas deportivas.
Hablamos de la Arena Veracruz, ubicada en Boca del Río y del Velódromo en la ciudad de Xalapa, los cuales eran usados para conciertos y eventos culturales durante el anterior mandato de Cuitláhuac García Jiménez.
Oscar Juanz Roussel, director del Instituto Veracruzano del Deporte, aseguró que los recintos deportivos se enfocarán en las disciplinas para los que fueron construidos, siguiendo las órdenes de la gobernadora Rocío Nahle con el objetivo de conservar dichos inmuebles, pues debido a sus características, se veían afectados por la vibración de la música.
Esta acción podría tener un cambio en el desarrollo y desempeño del deporte veracruzano, el cual atravesó demasiadas complicaciones en la administración pasada.
Con este cambio, las disciplinas como esgrima; boxeo; tiro con arco; voleibol; básquetbol; entre otras, podrán realizarse sin mayor problema.
La exigencia de justicia para los desaparecidos en Veracruz es un clamor que resuena con dolor y desesperanza en las palabras del Colectivo Solecito. Su reciente llamado para la destitución de Verónica Hernández Giadans, titular de la Fiscalía General del Estado (FGE), pone de relieve la falta de resultados en una dependencia que debería ser la punta de lanza contra la impunidad.
Lucía Díaz Genao, una de las voces más firmes de este movimiento, dijo que cuando un fiscal no da resultados, hay que cambiarlo. Y es que, aunque la incidencia de desapariciones forzadas ya no alcanza los niveles alarmantes de administraciones pasadas, el saldo es desolador. La mayoría de los casos permanecen sin resolver, sin detenidos, y, lo que es peor, sin justicia para las familias.
La Fiscalía, en lugar de ser un bastión de justicia, parece haberse convertido en un actor secundario en un drama donde las víctimas y sus familias llevan el peso del protagonismo.