Hasta en un 400 por ciento aumentaron las tomas clandestinas de gas licuado de petróleo (LP) en el estado de Veracruz, reveló un reporte de Petróleos Mexicanos (Pemex).
La empresa petrolera dio a conocer que actualmente en la entidad federativa existen más de 544 tomas, tan sólo en el 2018 apenas se habían detectado cinco, mientras que para el 2021 ya se habían rebasado las 122.
Asimismo, se dio a conocer un aumento en el número de municipios donde se registran dichas tomas clandestinas, en 2018 sólo se presentaban tomas en Acayucan, José Azueta, Maltrata y Tierra Blanca, pero para 2022, al menos 13 municipios reportaron esta actividad clandestina.
Los municipios que registran el mayor número de tomas son José Azueta con 170, Rodríguez Clara con 141 e Isla con 89 sólo al cierre del 2022.
Pemex logística informó que a nivel nacional el 2022, cerró con 2, 528 tomas clandestinas de gas LP que tuvieron un costo de reparación para la petrolera de más de 125 millones de pesos.
En marzo, el presidente de la Asociación Mexicana de Distribuidores de Gas Licuado y Empresas Conexas (Amexgas) Carlos Serrano, dijo que el robo a ductos es preocupante y detalló que en 2018 se registraron 215 tomas clandestinas de gas LP y para el cierre de 2021 fueron 2 mil 402.
“Desafortunadamente para el gas LP, para Pemex, estos grupos delictivos que dejaron de participar en el robo de gasolinas migraron hacia el robo de gas LP a los ductos de petróleos mexicanos”.
Al robo de gas mediante ductos, se suma el uso de vehículos para su venta, que se están usando de manera indebida o que no son registrados. Las organizaciones del sector calculan que hay entre 5 mil y 8 mil vehículos en esta situación.
“Es gas que termina dentro de los mismos mercados donde las empresas donde (están) las empresas formales, reguladas y que además pagamos impuestos. Esta distribución viene a ser una competencia desleal en el sentido que este gas es una cantidad importante”, dijo Luis Landeros, el presidente de la Asociación de Distribuidores de gas LP.