Ciudad de México | 2025-03-10
Tesla, una de las marcas líderes en la industria de los autos eléctricos, atraviesa un momento difícil en Europa. En mercados clave como Alemania, Francia y Noruega, sus ventas han disminuido de manera considerable.
Datos recientes indican que en Alemania la automotriz registró una caída del 76% en febrero respecto al mismo mes del año anterior. En Francia, las ventas bajaron más del 26%, mientras que en Noruega la participación de mercado de Tesla cayó del 20% en 2023 al 8.8% en 2024.
Uno de los factores que ha influido en este declive es la imagen pública de Elon Musk. De acuerdo con un reportaje de The New York Times, las posturas políticas y los comentarios controvertidos del empresario han provocado rechazo en varios países europeos.
En Alemania, su apoyo a un partido de ultraderecha ha generado preocupación en una sociedad con un fuerte sentido histórico sobre estos movimientos. Además, su respaldo a figuras como Donald Trump y su oposición a iniciativas progresistas han alejado a un sector significativo de consumidores.
El descontento hacia Musk y Tesla no se ha quedado solo en redes sociales. En ciudades como Estrasburgo, activistas han distribuido pegatinas en contra del magnate y su compañía.
En el sur de Francia, varios autos de Tesla han sido incendiados intencionalmente. En Londres, algunos colectivos han impulsado campañas para que las personas cancelen sus cuentas en X (antes Twitter) y eviten comprar productos vinculados a Musk.
El impacto de esta situación también se ha reflejado en el valor de las acciones de Tesla. Desde diciembre pasado, han perdido más del 40% de su valor.
Aunque en los últimos días han mostrado una ligera recuperación del 2.6%, los analistas coinciden en que la compañía enfrenta un desafío serio tanto por la competencia en el sector de los autos eléctricos como por la percepción pública de su fundador.
Especialistas de la industria automotriz en Noruega consideran que Tesla, que antes gozaba de una posición privilegiada, está perdiendo la confianza de los consumidores.
"Muchos compradores ahora lo piensan dos veces antes de elegir un Tesla, y el motivo no es solo el mercado, sino el ruido y la controversia que rodean a Elon Musk", señalan los analistas.
Con la competencia en el sector eléctrico en aumento y una imagen cada vez más polarizada, Tesla se enfrenta a uno de los retos más complejos de su historia en Europa.