México | 2025-02-05
Como si de una película de acción se tratara, la Tierra podría ser impactada por un asteroide del tamaño de un campo de futbol. Si bien la posibilidad es bastante remota, alrededor de un uno por ciento, las alarmas se han encendido entre la comunidad científica.
Se trata del asteroide denominado 2024 YR4; detectado por primera vez el 24 de diciembre de 2024 por el observatorio El Sauce en Chile, se estima por su brillo que dicho objeto tendría de 40 a 90 metros de ancho.
Si bien esto no suena mucho, el virtual impacto del asteroide 2024 YR4 podría provocar una explosión cientos de veces más poderosa que la bomba de Hiroshima, por lo que fácilmente podría destruir una o varias ciudades dependiendo la zona de impacto.
El asteroide 2024 YR4 ha llamado la atención de los científicos debido a un llamado hecho por la Red Internacional de Alerta de Asteroides, que el 29 enero de este año emitió un memorándum pidiendo ‘una colaboración global de defensa planetaria’.
Según la escala de riesgos de impacto de Turín, este asteroide ha sido clasificado en el nivel 3, por lo que cumpliría con todos los criterios para activar grupos de reacción ante asteroides los cuales estarían avalados por la ONU.
Medios internacionales informaron que será la próxima semana cuando el Grupo Asesor de Planificación de Misiones Espaciales (SMPAG) se reúna en Viena para evaluar lo que viene.
De mantenerse el riesgo de impacto por encima del uno por ciento se procederá a formular recomendaciones que incluirían la posibilidad de una misión para tratar de desviar el asteroide.
Según cálculos de la NASA, al día de hoy existe un 1.6 por ciento de probabilidad de que el asteroide 2024 YR4 golpee a la tierra el 22 de diciembre de 2032; el sitio de impacto se calcula al este del Océano Pacífico, el norte de Sudamérica, el Océano Atlántico, África, el Mar Arábigo y el Sur de Asia.
Por ahora, el asteroide 2024 YR4 se encuentra alejándose de la Tierra en una órbita elíptica que sigue un ciclo de cuatro años y se espera que vuelva a acercarse no antes del 2028. Los científicos son optimistas de que con el paso del tiempo la probabilidad de un impacto se reduzca a cero.
Aún así, los científicos permanecen atentos al paso del asteroide 2024 YR4; mientras tanto, se evalúa la posibilidad de repetir la misión DART ocurrida en el 2022, cuando una luna del asteroide Didymos fue desviada con éxito mediante un ‘impactador cinético’.