¿Qué pasa si tomo todos los días agua mineral?
*En épocas de calor, muchas personas optan por refrescarse con agua mineral*
Ciudad de México | 2024-06-06
En épocas de calor, muchas personas optan por refrescarse con agua mineral o carbonatada. Sin embargo, consumir estos líquidos diariamente puede tener implicaciones en la salud que es importante conocer.
DIFERENCIAS ENTRE TIPOS DE AGUA
El agua mineral y el agua con gas son populares por su sabor burbujeante. Según Larousse Cocina:
- Agua mineral: tiene gas natural y es rica en minerales como calcio, sodio y magnesio.
- Agua con gas: se le añade dióxido de carbono artificialmente.
- Además, la Profeco identifica un tercer tipo: agua mineralizada, que es agua purificada a la que se le añaden minerales y gas para simular las propiedades del agua mineral.
BENEFICIOS Y RIESGOS
El sitio de Cleveland Clinic y la Universidad de Medicina de Chicago explican que estas aguas son una alternativa más saludable que los refrescos.
No obstante, recomiendan revisar los ingredientes, ya que algunas marcas pueden añadir azúcares y saborizantes, aumentando la ingesta calórica.
CONSUMO DIARIO Y EFECTOS
Tomar agua mineral todos los días podría tener efectos negativos si se consume en exceso. La Revista del Consumidor de Profeco advierte sobre los posibles efectos secundarios debido a sus componentes:
- Calcio: el consumo excesivo puede provocar cálculos renales.
- Cloruro: puede aumentar la presión arterial.
- Fluoruro: puede debilitar el esmalte dental.
- Magnesio: puede causar debilidad muscular.
- Potasio: puede aumentar el riesgo de hiperpotasemia.
- Sodio: puede llevar a la retención de agua y a la hipertensión arterial.
- Sulfato: puede causar diarrea y deshidratación.
EFECTOS INMEDIATOS
- A corto plazo, el consumo de agua carbonatada puede causar inflamación, eructos, dolor de estómago y gases. Estos efectos suelen ser menores, pero si persisten, se recomienda optar por agua sin gas.
El agua mineral y con gas pueden ser una opción refrescante y más saludable que los refrescos, pero su consumo debe ser moderado. Estar consciente de sus componentes y efectos es crucial para mantener una dieta equilibrada y evitar complicaciones de salud.