| 2025-02-06
Una de las cosas más normales en las relaciones personales es recurrir a la mentira la cual es una información que damos de manera consiente y que sabemos que no es verdad ya sea total o parcialmente, esto incluye ocultar información.
Como sea, las mentiras las utilizamos todos los días, y algunas personas las usan más que otras. Sin embargo esto podría convertirse en un problema que de mínimo, podríamos perder la confianza de la persona con la que tenemos la relación. Y de acuerdo con la psicología hay una razón para usar las mentiras.
La motivación para recurrir a las mentiras son diferentes, desde la supervivencia hasta ocultar otras mentiras. Aunque a veces las mentiras pueden ser útiles para evitar conflictos o situaciones indeseadas, estas pueden convertirse en un problema más grande cuando se descubren.
Este comportamiento humano es muy común, y se por factores cuando buscamos protección, adaptación, queremos obtener un beneficio, consideración de la otra persona, venganza y más. Sin embargo para la psicología las mentiras son asociadas con trastornos como la mitomanía o de personalidad antisocial.
"La mitomanía es una falsificación desproporcionada que puede llegar a ser extensa, complicada o presentarse durante años o incluso toda la vida", explica la doctora Maricarmen Jiménez Colín, del Departamento de Psiquiatría y Salud Mental de la Facultad de Medicina de la UNAM.
En pocas palabras, los mitomanos pueden presentar alteraciones en ciertas áreas del cerebro relacionadas con la toma de decisiones y el control de los impulsos, según Psychiatry Research. Para tratar este trastorno, se debe llevar una terapia cognitivo-conductual o recetar medicamentos contra la ansiedad o depresión.
Por lo que si conoces a una persona que utilice las mentiras de forma recurrente es importante que reciban ayuda profesional para mejorar su bienestar y sus relaciones en general.