Orizaba | 2024-12-16
El derrumbe de un talud que mantiene bloqueado desde hace 50 días el tránsito en la autopista 150D Orizaba-Puebla se ha convertido en un problema crucial para el sur y sureste del país.
Enrique Guillomen Maldonado, presidente de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) en Orizaba, destacó que esa situación ha venido a complicar aún más un año que ya venía complejo por varios temas, como el de la transición y la inseguridad en esa carretera.
"Es un tema que hoy en día se ha convertido en crucial para toda esta zona y para la economía de todo México", consideró.
Guillomen Maldonado resaltó que desde el derrumbe, ocurrido el pasado 25 de noviembre a la altura del kilómetro 230 de la mencionada autopista, los gastos para los transportistas se han ido tres veces más arriba.
También, apuntó, ha evidenciado que las carreteras ya son insuficientes y en estas fechas se está viendo más que nunca.
A ello hay que sumar, recordó, la inseguridad para los transportistas, que se incrementa todos los años, en donde ya no pueden ni viajar de noche, tiene que hacerlo sólo de día y desde las 6 de la mañana se "amontonan" todos los camiones hasta que cae el sol.
El presidente de la Coparmex Orizaba señaló que a las autoridades se les ha solicitado por parte de las diferentes cámaras, no sólo la Coparmex, que haya más atención en el tema de la seguridad para salvaguardar la integridad y patrimonio de todos los ciudadanos y las empresas.
Recordó que el secretario de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes (SICT), en su reciente visita a Orizaba acompañando a la presidenta de México, Claudia Sheinbaum, anunció que a finales de enero quedarían libres dos carriles de la autopista para poder circular y en abril estaría totalmente abierta, pero hasta ahora no hay claridad en el tema porque no hay "absolutamente" nada de información, por lo que sólo son esos anuncios que hicieron.
Mencionó que entre tanto, los transportistas han tenido pérdidas millonarias por el incremento en los costos operativos, ya que las rutas alternas son más largas y presentan condiciones irregulares, generando congestionamientos.
La situación también ha afectado a los habitantes locales, quienes enfrentan mayores tiempos de traslado y dificultades en el acceso a bienes y servicios esenciales.
Cabe recordar que el mencionado deslizamiento cubrió 150 metros de longitud, con más de 130 mil metros cúbicos de material que quedó sobre esa vía, pero además del retiro del material, el titular de la SICT, Jesús Esteva, mencionó en su visita a Orizaba que se trabaja en obras de contención para evitar futuros deslizamientos.