El gobernador Cuitláhuac García Jiménez emitió un decreto para que aquellas personas que no han reemplacado su vehículo, tengan una nueva oportunidad con beneficios fiscales mejores a quienes cumplieron en tiempo y forma.
Ahora el costo del reemplacamiento será de mil 139 pesos con 90 centavos, pero a cambio recibirán la condonación del pago de Impuesto a la Tenencia Vehicular, al derecho al control vehicular, a la baja por cambio de propietario y a la reexpedición de tarjeta de circulación.
Aunado a ello, tendrán la facilidad de poder hacer el pago de su reemplacamiento en mensualidades y tendrán como plazo para realizar el pago hasta el 31 de agosto del presente año.
A través de un decreto publicado en la Gaceta Oficial del Estado en un número extraordinario, el mandatario estatal estableció que se encuentra facultado para otorgar subsidios o estímulos fiscales mediante resolución de carácter general.
Con tal acción, dijo, se busca no afectar la rama de actividad, la producción o venta de productos o la realización de una actividad, por lo que resulta necesario tomar decisiones oportunas que permitan una distribución de la carga tributaria que se acerque más a la capacidad económica de los contribuyentes.
Por ello, indicó que respetando el principio de proporcionalidad tributaria para lo cual el presente Decreto tiene como fin generar un apoyo a la economía de las familias veracruzanas, atendiendo a la política social que caracteriza al Gobierno federal y estatal, es que tomó la decisión de ampliar los beneficios para quienes no han reemplacado.
Reconoció que muchas personas no cuentan con la posibilidad económica de realizar el pago para su reemplacamiento, por ello, ahora se les dan nuevas facilidades.
En ese sentido, se creó este nuevo programa para atender a todos aquellos contribuyentes que, por diversas circunstancias, no pudieron adherirse al Decreto y sus modificaciones que establecía el Programa de Canje de Placas del ejercicio fiscal 2022.
Y ahora podrán de manera extemporánea obtener sus placas de circulación y puedan cubrir las contribuciones que por falta de capacidad de pago no han podido realizar, generando la regularización de su situación fiscal e impactando en su productividad al disponer de los recursos de cuyo pago se les libera, circunstancia que tiene repercusiones en la economía del Estado y genera certidumbre jurídica sobre el patrimonio familiar.