Este fin de semana, en su tradicional comunicado dominical, la Arquidiócesis de Xalapa lamentó que “muchas veces, quienes alcanzan el poder, terminan sirviéndose de él, para su propio beneficio y se olvidan de los demás.
“Vivimos ciertamente en un mundo donde predominan muchas formas de egoísmo, de violencia, sed de ganancia, búsqueda de éxito y de poder”, añadió.
De igual forma, el vocero de la Arquidiócesis de Xalapa, José Manuel Suazo Reyes, criticó que quienes llegan al poder, hacen a un lado los valores éticos y corrompen sus conciencias aunque lo que hagan sea irracional, antinatural y atente contra el bien común.
“Lamentablemente el abuso del poder es una cosa cotidiana que no se ha podido erradicar. Esta forma de ejercerlo va acompañado de corrupción e impunidad”, agregó
En ese sentido, el sacerdote mencionó que quienes creen en Dios están llamados a construir su reino a través de la verdad, de la justicia, el amor, y la paz.
“Esta es una tarea sublime que requiere empeño, entusiasmo, dedicación y espíritu de sacrificio, unidos a Cristo y a sus enseñanzas se puede alcanzar”, añadió.
Tal mensaje lo dio al llegar al último domingo del año litúrgico, donde la Iglesia Católica celebra la fiesta de Cristo Rey.
“Jesucristo es el rey del universo porque él es el Hijo de Dios, él es la imagen visible de Dios Invisible. Todo fue creado por él, todo subsiste por medio de él y por su medio, Dios ha reconciliado a todos. Es él la cabeza de la iglesia, nosotros somos su cuerpo”, añadió.
Indicó que por medio de su inmolación en la cruz él muestra cómo desempeña su realeza. Lo hace a través del servicio y de la entrega de su propia vida. Como él mismo lo había declarado “no he venido para ser servido, sino para servir y para dar mi vida en rescate por muchos.
Por lo tanto, la realeza de Jesús no se comprende desde las categorías del dominio o del poder, sino desde el servicio y la entrega a los demás. Ser Rey según el corazón de Jesús es convertirse en un servidor de los demás.