La gran mayoría de los crímenes de odio contra la comunidad LGBT+ se mantienen en la impunidad, ya que de 2013 a la fecha sólo cuatro personas han sido vinculadas a proceso.
El presidente de la Coalición Estatal LGBTTIQ+, Benjamín Callejas Hernández consideró que además del déficit de atención, la aplicación de la ley sobre los responsables no garantiza la resolución de los casos.
El activista puso como ejemplo el caso de Abiram Hernández, ocurrido en Xalapa, el cual de acuerdo a familiares de la víctima no habría sido plenamente esclarecido.
“Platicamos con la familia y nos decían que no estaba satisfecha con esa resolución, y que no creían que la persona que está purgando esa condena realmente sea el asesino de Abiram”.
Benjamín Callejas criticó que las autoridades, específicamente la Fiscalía General del Estado, no implementen un protocolo adecuado para esclarecer los crímenes de odio ocurridos en Veracruz.
Y es que señaló que, al no haber acciones contundentes contra el asesinato de miembros de la comunidad LGBT, se siguen propiciando condiciones para los ataques mortales.
Lo anterior, a pesar de que en 2016 se modificó el artículo 144 del Código Penal del Estado para que se tipifiquen los crímenes de odio por homofobia en el estado de Veracruz.
“El andamiaje ya está hecho, yo no sé realmente por qué no ha habido esta inercia de querer armonizar en un organismo que es de suma importancia, y donde la ciudadanía lo que busca es una certeza de la impartición de justicia”.
Benjamín Callejas recordó que de 2013 a la fecha se registran más de 288 crímenes de odio en la entidad; 2019 es considerado el año más sangriento para la población LGBT, ya que en total se contabilizaron 32 crímenes de odio.