El mal tiempo de los últimos días en la costa del Golfo de México ha golpeado a los trabajadores del mar, con mínimas capturas de especies que se traducen en una maltrecha economía, lamentó Bernardo Hernández Guzmán, presidente de la Federación de Pescadores de Veracruz.
Dijo que hasta hace unos días se tenía lo más parecido a un 'verano' y las condiciones climatológicas permitieron una recuperación de 30 por ciento, que fue una bendición para el sector al que representa.
Se empezó a capturar sierra y peto, que ya casi ni se veían, pero con las lluvias, pero los vientos y las marejadas revuelven el agua, aunado a que los escurrimientos de los ríos arrastran palizada y basura desde las tierras altas hacia el mar, subrayó.
"Ante esa situación, la corrida de pampanillo, que además de esa especie arrastra a la tripa (un cazón pequeño), pasa de largo prácticamente frente a las narices de los hombres de mar y empieza a verse afectada por el mal tiempo y perjudica a los pescadores, a su economía y a sus familias.
"Ésta es la corrida de pampanillo; antes de capturaba esa especie y bastante, incluso este año recaló respecto de hace 4 a 5 años, viene acompañado de sierra, tripa y cojinuda, pero ya viene diciembre y serán más escasas las capturas", destacó Hernández Guzmán.
Mencionó que lo que sí hay todo el año es pero, besugo, huachinango y extraviado.
Cabe señalar que el sector de los pescadores ha sido uno de los más castigados por la pandemia del coronavirus, pues en otros años los hombres de mar podían emplearse en oficios como la albañilería, pintar casas, un poco de electricidad y carpintería, pero ante el desplome de la economía y el desempleo, nadie puede contestar esos servicios.